Eso supone un importe total de seis millones de euros y una rentabilidad del orden del 5% tras ganar 7,28 millones de euros en el primer semestre del ejercicio un 11,46% más, aunque la facturación se redujo un 6% en ese período hasta los 28,5 millones de euros. La rentabilidad anual del valor ronda el 12%.
Los recientes máximos anuales sobre los 2,1 euros por acción a finales de agosto, que ha alentado la recogida de beneficios junto al vértigo provocado por el descuento del dividendo en la acción, han tenido un fuerte efecto negativo sobre la acción que se ha deslizado otra vez hacia los 1,88 euros por acción tras sufrir un fuerte castigo el pasado jueves.
Este retroceso, por cuestiones meramente puntuales, no parece que vaya a suponer un frenazo en la tendencia alcista del valor, en el año mantiene una revalorización del 15%, hacia los niveles previos a la pandemia.