Coincidiendo con la presentación de sus cuentas correspondientes a su tercer trimestre fiscal a finales de julio se ha producido un ajuste del 5%, pero los analistas consideran que esa caída responde más a una lógica retirada de beneficios que a posibles dudas en sus proyecciones de beneficios.
Muy al contrario, la compañía ha ganado 237 millones de euros entre octubre y junio, un 22,4% más, con un crecimiento de los ingresos del 3,6% que ya rondan los 9.500 millones de euros. Y eso que todavía tiene por digerir las recientes adquisiciones como el porcentaje del 26,7% que le quedaba para hacerse con la totalidad de transportes El Mosca o la multinacional belga de paquetería farmacéutica adquirida a finales del año pasado.
Con todo, los expertos técnicos creen que todavía podría estar en pleno proceso de ajuste en busca de soporte en un nivel que podría estar ligeramente por debajo de los 26 euros. Una vez confirmada la estabilización en torno a esa cota, lo más probable será el inicio de una nueva fase alcista para alcanzar nuevos máximos.
A algunos operadores, sin embargo, les está empezando a surgir algunas dudas ante los temores que sacuden al mercado sobre una posible recesión que pudiera minar su actividad, por lo que aconsejan cierta prudencia ante la posibilidad de poder comprar a precios más atractivos.