La empresa de energía renovables, a pesar de todo, mantiene unos alto niveles de ingresos recurrentes al contar con 1.000 millones de dólares garantizados en los próximos 15 años gracias a los PPA por la producción de 349 MW de energía fotovoltaica en República Dominicana, Honduras, Guatemala y Colombia.
A estos países se ha sumado recientemente Panamá en su objetivo de seguir creciendo con rapidez en tamaño para aumentar la rentabilidad y la sostenibilidad mediante la diversificación geográfica. Para ello, Ecoener iniciará en septiembre la construcción de 50 MW fotovoltaicos en el país centroamericano, según anunció su presidente, Luis de Valdivia, en la pasada Junta General de Accionistas.
Un paso más en su compromiso de alcanzar los 1.000 MW en operación y construcción en 2025. Al cierre de 2023 contaba con una cartera de activos de 740 MW, de los que 341 están en operación y 400 en construcción. Unas cifras que deberá actualizar en la presentación de sus cuentas del primer semestre previstas para finales de septiembre.
A la espera, los inversores se mantienen al margen del valor. En lo que va de año ha mantenido una tendencia lateral bajista en los últimos meses hasta acumular una caída del 14% que ha puesto en riesgo importantes niveles de soporte.
De perder la cota de los 3,7 euros por acción, sobre los que se mueve en la actualidad, se abriría un nuevo gap bajista hacia los 3,5 euros. Su último clavo ardiendo si no quiere volver a deslizarse a zona de mínimos históricos.