La energética que preside Enrique Díaz-Tejeiro registró una fuerte subida de cotizaciones allá por el mes de junio basada en los rumores de una potencial oferta pública de adquisición (OPA) por parte de Endesa. Desde entonces, el valor ha perdido la cota de los doce euros por título para situarse ayer a 11,18 euros por acción que supuso una revalorización del 0,9% en el día. Pese a todo, la cotización de Solaria acumula una pérdida del 37,43% con respecto a los 17,87 euros que valía a principios de año.
No obstante, la cifra es algo mejor que la que presentaba a finales de mayo, cuando las posiciones bajistas alcanzaban el 10,66%. Desde entonces, Norges Bank ha desecho sus posiciones, aunque otros las han ampliado sustancialmente.
Hasta siete fondos internacionales mantienen posiciones a corto sobre Solaria. La oficina londinenses del gigante BlackRock es la más interesada en la empresa de renovables española ya que mantiene el 4,29% de sus acciones a corto desde el pasado julio cuando subió su participación 50 puntos básicos. El estadounidense Voleon Capital mantiene el 0,69%; mientras los británicos Qube Research & Technologies controla el 2%, Pertento Partners, el 0,98%y PDT Partners el 0,89% del capital de Solaria.
El fondo especializado en inversiones alternativas, Marble Bar (también del Reino Unido) mantiene el 0,52% y el irlandés SFM, con el 0,71% de la energética española se mantienen pendientes de que su cotización baje aún más.
La ‘medalla de plata’ en posiciones bajistas es, hoy por hoy, Enagás. La energética que dirige Arturo Gonzalo cuenta con el 3,62% de su capital en posiciones cortas. BlackRock, con el 2,36% es el bajista más posicionado en el valor, seguido por el Canada Pension Plan Investment Board (de gestión pública), con el 0,56% y la inversora neoyorquina DME Capital, que cuenta con el 0,91%. Curiosamente, mientras la gestora de las pensiones canadiense baja posiciones, los dos inversores estadounidenses las aumentan ligeramente.
Bankinter, en observación
Tras la empresa de renovables, el segundo valor de la bolsa española con más posiciones bajistas es Bankinter, cuyo 3,57% está en manos de fondos especulativos. Está por ver si el fallecimiento del fundador, Jaime Botín, y las dudas que eso pueda acarrear sobre la gestión de su principal accionista, la sociedad de cartera de la familia, Cartival (control el 23,186%) mueve a más inversores especulativos.
De momento, los cuatro fondos que invierten a corto en Bankinter controlan el 2,52% del accionariado. El fondo de cobertura estadounidense Point72 Asset Management. y su filial londinense, Point72 Europe poseen el 1,06%; seguidos por Marshall Wace (británico), con el 0,77% y por el Canada Pension Plan Investment Board, el 0,69%.
Curiosamente y pese a la OPA, el Banco Sabadell solo tiene un inversor especulativo declarado, la compañía de inversiones alternativas británica Millennium que hace apenas unos dias, ha elevado su participación en diez puntos básicos hasta el 0,62% del capital. Conviene recordar que, desde junio de 2010, la CNMV obliga a comunicar las posiciones cortas (bajistas) que superen el 0,2% de una empresa cotizada.
Según los últimos datos de la CNMV, hay posiciones cortas sobre 17 los valores de la Bolsa española. De ellos, cinco pertenecen al sector energético (Solaria, Enagás, Audax Renovables -1,64%- Acciona Energia -0,57%- y Redeia -0,54%-); dos son bancos (Bankinter y Sabadell). A ellos se suman dos constructoras, ACS, con el 1,74% y ACCIONA (0,8%) y otros dos compañías de la llamada industria auxiliar como FLUIDRA (1,26%) y Vidrala (0,5%).
Telefónica cuenta con el 1,74% de su capital en posiciones bajistas. Mientras en el sector industrial están Tubacex (0,7%), Acerinox (0,62%) y Técnicas Reunidas (0,59%).
El sector farmacéutico tampoco escapa de los especuladores, Grifols, en plenas turbulencias de gestión cuenta con el 1,35% de sus acciones en manos de fondos como Millenium, que acaba de subir su participación al 0,55% y Marshall Wace que posee el 0,57%. Junto a ella, Pharma Mar tiene el 0,59% en manos de la inversora con sede en Chicago (EEUU), Citadel Advisors.