Como si pretendiera ser el "caballero blanco" de la operación, después de expresar claramente sy apuesta por la fusión. el gigante inversor estadounidense BlackRock ha subido su participación en el Banco Sabadell hasta el 6,7% en plena tramitación de la oferta pública de adquisición (OPA) presentada de forma hostil sobre la entidad catalana que preside Josep Oliú.
Si la OPA supera los filtros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y es aprobada también por el BCE, el BBVA podrá poner encima de la mesa un paquete accionarial del Sabadell que le permita inclinar a su favor la batalla sobre la entidad vallesa. Un movimiento muy parecido al que desarrolló el BBV enArgentaria, donde alforó casi u n 10% de su capital en los momentos claves del asalto. Un empujón del Banco de España hizo el resto.
El movimiento de BlackRock ‘reconstruye’ y corrige operaciones anteriores. La semana pasada, el fondo estadounidense bajaba su participación al 6,5%. Esta subida del peso en el capital de la entidad catalana está formada, en su mayor parte, por derechos de voto (el 6,606%) e instrumentos financieros (el 0,144%). El Sabadell cotiza en Bolsa a 1,78 euros por acción, este paquete tiene un valor de 653,6 millones de euros, pese a que los títulos de la entidad vallesa bajaban ayer el 1,52% en el mercado de valores español.
La clave es, precisamente, la baza ‘política’ de los derechos de voto, la baza que más vale en este momento; sobre todo porque en un horizonte como el que se plantea ante la OPA hostil (supondrá cerca de un año de tramitación administrativa) los accionistas de esta dimensión tendrán mucho que decir ante los consejos y las juntas generales de las entidades.
En 1999, cuando el sector bancario español acometía su primera gran concentración, el banco vasco ya había mostrado, aunque sin éxito, su estrategia de crecer mediante la incorporación de otras entidades. BBV (fruto de la fusión entre el Bilbao y el Vizcaya) no quería perder ‘comba’ ante la fusión del Banco Santander con el Central Hispano.
Sin embargo, la entidad presidida entonces por Emilio Ybarra arrastraba sendos fracasos tras frustrarse su OPA sobre Banesto (la primera oferta hostil en España) por la intervención del Banco Central (presentó una oferta mejor) y de la fallida fusión con la italiana UniCredito.
De ahí que, cuando se decide a plantear la integración con la resultante de toda la banca pública española, Argentaria (entonces recién privatizada) lo hace con un paquete del 4,9% de la entidad que presidía entonces Francisco González (FG). Como inversor significativo, la capacidad de ‘presión’ creció.
Búsqueda de un caballero blanco
Pero tanto Torres como su equipo y, especialmente, el banco ‘opado’, el Sabadell, saben bien que la oposición del Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez puede convertirse en un obstáculo insalvable. O casi. Si el comprador es capaz de presentar un apoyo significativo por parte de los accionistas del Sabadell, la posición política quizá pueda cambiar.
Es necesario, por tanto, buscar un ‘caballero blanco’ que pueda construir ese paquete dado que, a falta de la aprobación oficial de la OPA por la CNMV al menos (el visto bueno de Competencia se antoja más difícil y lejano en el tiempo), el BBVA no puede hacerlo.
Aunque en este caso, ese caballero blanco ha aparecido solo BlackRock, que es el primer accionista de ambas entidades ya que controla el 6,7% del Banco Sabadell y el 5,48% del BBVA. En este caso, por delante del grupo Capital Group Companies (GGC, con sede en Delaware, EEUU) que ostenta el a través de Capital Research And Management Company el 5,027%.
El capital de la entidad vallesana está repartido entre Blackrock y el fondo estadounidense Dimensional (3,795%), el inversor mexicano David Martínez (3,495%), mientras su sociedad inversora Fintech Europe declara otro 3,105% seguido por el noruego Norges Bank (1,727%) y la alemana DWS Investment (1,035%).
Los estadounidenses Goldman Sachs (1,014%) y el Vanguard Total International Stock Index Fund, con el 1,338% de las acciones, completan el listado de principales accionistas del Banco Sabadell.
La gran duda seria el comportamiento que mosrrarán los accionistas minoritarios del Sabadell, que componen más del 50% del capital del banco. Para ellos, la OPA es una cuetsión de precio y rentabilidad.