En estas semanas, el valor ha subido cerca de un 5%, reforzando la tendencia alcista que venía desarrollando desde principios de año tras rondar mínimos absolutos en la recta final del pasado ejercicio. La mejora de las ventas en el primer trimestre hasta los 1.484 millones de euros, un 1,1% más, gracias al positivo desempeño del negocio en España y la resiliencia de Argentina en un entorno muy complicado están justificado en buena medida el rebote experimentado.
Sin embargo, para dar continuidad a este movimiento para alcanzar el punto de equilibrio debe seguir redoblando sus esfuerzos en la reducción de la deuda y resolver asuntos pendientes como la posición del negocio en Brasil tras la presentación de una solicitud de protección judicial para afrontar su delicada situación financiera.
La consolidación del negocio en España y Argentina tras finalizar la fase de turnaround que debería haber abierto ya la puerta a un movimiento de crecimiento orgánico basado en su apuesta por la proximidad, ofreciendo al cliente una experiencia de primer nivel, parece un buen principio.
De momento, el valor está batallando por consolidar su posición sobre los 0,013 euros por acción tras haber chocado con una dura resistencia en las inmediaciones de los 0,014 euros por acción. Pero, si las noticias y el mercado siguen acompañando, podría dar un salto cualitativo con un siguiente objetivo en los 0,015 euros que devolvería el sueño y la alegría a sus accionistas.