La acción volvió a despuntar este lunes en el Ibex 35 (donde acumula una gran subida del algo más del 20% este año) y escaló este lunes hasta máximos del año por encima de los 3,15 euros. Un avance en el que fueron decisivas las mejoras de precio objetivo de algunas de las firmas internacionales con más capacidad para mover el mercado. Barclays, Morgan Stanley, RBC o JP Morgan han elevado sus valoraciones de forma más o menos significativa tras las cuentas.
“A medida que se lee la letra pequeña de los resultados, más se vislumbra la posibilidad de que la subida de IAG en bolsa tenga continuidad. Las pérdidas de los tres primeros meses del año han sido un 95% inferiores a las del año pasado y han superado por mucho las expectativas, mientras que el aumento de los ingresos ha cumplido de sobra las previsiones”, señala un analista del sector que tiene el valor con recomendación de compra.
JP Morgan cree que la compañía vuela con el viento a favor y que puede seguir superando las previsiones hasta llegar a un ‘ebit’ de 3.800 millones de euros. Suficiente para justificar un precio objetivo de 2,60 euros. En la misma línea se sitúa RBC, que ve la cotización en los 2,67 euros y destaca la recuperación de los ingresos en los vuelos del Atlántico Norte. En general, los expertos no ven ninguna sorpresa negativa en las cuentas.
Barclays, muy optimista
Barclays es una de las firmas más optimistas con un precio objetivo de algo más de 3,10 euros y destaca como las grandes ratios de IAG han batido a los de sus competidores. Las diferencias con estos últimos son importantes, ya que Air France-KLM o Lufthansa han perdido 522 y 734 millones de euros, respectivamente, por encima del 50% más en ambos casos respecto a 2023.
En general, el sentimiento de mercado no puede ser mejor para un valor que ya se ha consolidado sobre la cota de los 2 euros, que no abandona desde el pasado 19 de abril. Todo hace indicar que se está haciendo fuerte ahí antes de pisar el acelerador. La mejor demostración es que el porcentaje de recomendaciones de compra se ha situado tras los últimos ajustes en los niveles más altos desde la primavera de 2020, mientras que el de compra está en niveles sencillamente testimoniales.
“Nadie quiere vender a estos niveles porque todo el mundo entiende que hay recorrido de sobra al alza”, señala un analista técnico que cree que el valor tiene vía libre al menos hasta los 2,50 euros por acción. De momento, en los niveles más altos en bolsa de los dos últimos años y medio, IAG está venciendo al vértigo de unos inversores que han encontrado en los resultados la excusa perfecta para seguir pisando el acelerador.
Y hay una palanca más, la del dividendo, que el grupo no quiere activar todavía. En la presentación de resultados, IAG ha asegurado que no habrá anuncio oficial hasta que la compañía se pueda asegurar de que la retribución será sostenible en el tiempo. Todo indicar que la vuelta del pago a los accionistas será más pronto que tarde. Un as en la manga que la compañía rentabilizará con toda seguridad en bolsa en un futuro no muy lejano.