Otro de los puntos destacables en sus cuentas ha sido la capacidad de originar nuevas oportunidades de inversión en suelo y de atraer capital de terceros. Cifras que reflejan su compromiso de crear valor sostenible para sus accionistas y que le permite consolidar su firme posición en el mercado.
Durante su ejercicio fiscal, el grupo inmobiliario ha logrado unas preventas producto Build to Sell (BtS) y Build to Rent (BtR) por importe superior a 960 millones de euros (2.500+ viviendas), mientras la división de Servicios Inmobiliarios ha completado dos operaciones de coinversión por valor cercano a los 300 millones de euros.
La compañía sigue avanzando, además, en el proceso de construcción de las cerca de 3.600 viviendas asequibles correspondientes al Plan Vive I, lo que permitirá entregar el 65% de las mismas en el ejercicio 2024/25. A ello se suma la reciente adjudicación de tres nuevos lotes del Plan Vive III que representan cerca de 1.000 viviendas destinadas al alquiler asequible.
Unas sólidas cifras provisionales que la compañía espera certificar en la presentación definitiva de los resultados prevista para el 29 de mayo. De momento, el mercado ha recogido con contención este avance de las cuentas y la acción apenas sigue sin moverse en torno al precio de 18,4 euros con el que arrancó el año.