La junta aprobó también la ampliación del número de consejeros a 14 tras la salida voluntaria de la inversora Alicia Koplowitz y la entrada de tres nuevos miembros, dos en representación del accionista de control, Enel (posee el 70%) Michela Mossini y Elisabetta Colachia y de Guillermo Alonso, como consejero independiente.
Tal como explicó José Bogas en la junta general, de los 8.900 millones de euros de inversión prevista entre este año y 2026, el 90% (8.000 millones) se centrarán en Distribución (redes), Renovables y Clientes.
El primer ejecutivo de la eléctrica española calificó de “clave” y “crítico” invertir en redes de distribución. “Sin redes dimensionadas y resilientes no será posible la Transición Energética”, aseguró. Para añadir que “Endesa tiene capacidad para incrementar la inversión (…) pero es necesario que la regulación de esta actividad mejore, que se eliminen los topes a la inversión y que la remuneración sea adecuada”. Tal como subrayó, la legislación actual “nos está haciendo perder oportunidades a nivel país para atraer empresas, talento y tejido industrial” como los centros de proceso de datos.
Tras pedir una retribución al capital “razonable y al nivel de otros países de nuestro entorno”, Endesa reclama “agilizar los trámites para el otorgamiento del acceso y conexión de la demanda y mejorar los procedimientos para garantizar la conectividad a la nueva industria que quiere y necesita conectarse a la red”.
El consejero delegado de la compañía criticó el impuesto a los ‘beneficios caídos del cielo’ que impuso el Gobierno, al que calificó de “agravio comparativo y competitivo en el marco del derecho europeo” y aseguró que “mantener un gravamen extraordinario detrae opciones a nuestra capacidad para invertir “.
Mas eólic y más redes
Además de las inversiones en redes, el desarrollo de las energías renovables captará otros 4.300 millones (la mayor partida del plan a 2026) donde Endesa priorizará el peso de la energía eólica con la que espera alcanzar los 13.900 Megavatios (MW) de potencia instalada en tres años. Las inversiones las realizará tanto en solitario como incorporando socios en proyectos concretos.
Aunque como en el caso de las redes de distribución, Bogas esgrimió la necesidad de “otorgar seguridad jurídica a las inversiones para que se pueda avanzar en la descarbonización”. La eléctrica muestra su preocupación ante la “creciente oposición social y la judicialización de la ejecución de numerosos proyectos”.
El consejero delegado de Endesa recordó a sus accionistas la desconexión de sus últimas centrales de carbón en As Pontes (Andorra) y Pego (Portugal) en generación eléctrica y avanzó qu este año, la compañía no realizará ninguna inversión en generación regulada, un ámbito en el que volvió a solicitar que se actualice a regulación “mejorarla y agilizar los trámites para adaptarla a las necesidades actuales”.
En el área de Clientes, Endesa invertirá 900 millones de euros con el fin de alcanzar en tres años los 7,5 millones de clientes en España y Portugal dentro del mercado libre; para lo que prevé desarrollar una estrategia comercial enfocada en la promoción y apoyo a sus clientes en la “electrificación de sus usos energéticos”.
Tras el descalabro que los vaivenes internacionales del mercado del gas provocaron en las cuentas del año pasado, la compañía prevé para este año una recuperación de los márgenes y mantener su actual cartera de 1,8 millones de clientes (1,4 millones en el mercado libre). Aunque, bien es cierto, José Bogas avanzó que sus previsiones pasan por “un descenso en el uso del gas para producir electricidad en centrales de ciclo combinado”, como consecuencia del crecimiento de las renovables en el mix energético.
Durante el ejercicio pasado, Endesa incorporó 600 MW de nueva capacidad renovable hasta alcanzar los 9.900 MW.