Los últimos días están dejando movimientos muy significativos. Por ejemplo, la rebaja de la posición corta de Canada Pension Plan en Telefónica, donde el fondo de cobertura ha reducido hasta el 0,65% del capital. Un movimiento relevante teniendo en cuenta que la operadora ha superado el listón de los 4 euros por acción con solvencia. Pero lo que podría haber sido una excusa para elevar la presión lo es ahora para cubrirse las espaldas.
Aflojar en Telefónica
La compra por parte de la Sepi del 3% de Telefónica y, sobre todo, el hecho de que aún debe comprar otro 7% de la compañía para llegar al objetivo del 10%, va a servir de sostén a la cotización, que apunta a subidas del 20% este año. Y con estas cartas sobre la mesa, no es previsible que los bajistas (BlackRock tiene otra posición corta del 0,60%, también por debajo de los niveles de finales del año pasado) quieran arriesgar mucho más.
Si en Telefónica impactan los factores estratégicos, en Grifols son puramente de mercado. Qube Research & Technologies, su mayor bajista, ha desaparecido del capital de la compañía, que se ha consolidado por encima de la cota de los 8 euros. “Hay algunas señales positivas en Grifols, como que esta semana ha bajado bastante la volatilidad. Ahora estamos viendo un valor mucho más estable en bolsa”, señalan fuentes bursátiles.
Informe de la CNMV
Tras la reacción bajista provocada por el informe en el que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) obliga al valor a re-expresar sus cuentas, la tranquilidad (ya se verá hasta qué punto efímera) ha vuelto a un valor que todavía arrastra caídas cercanas al 50% en lo que va de año. La ausencia de bajistas con participaciones significativas le puede permitir un segundo trimestre del año de tregua en el parquet.
Donde la actividad sigue siendo intensísima en el sector de la energía, castigado y relegado en las carteras de los gestores durante este primer trimestre del año. Los bajistas, que se han llenado los bolsillos con las ‘utilities’ y las renovables, están reestructurando a toda velocidad sus estrategias con movimientos en todas las direcciones que tratan de aprovechar el momento de mercado.
No hay indulgencia con dos de las compañías del Ibex más castigadas del año. Sólo Grifols cae más que Solaria (la ‘renovable’ pierde alrededor de un 45%), donde la estrategia de acoso y derribo de los bajistas va a aumento. BlackRock, Citadel y AHL Partners han elevado sus posiciones cortas en los últimos días y llevan el global de posiciones cortas por encima ya del 6%.
A otra escala, Acciona Energía Renovables (el tercer valor del Ibex que más pierde este año en Bolsa, por encima del 25%), ve como los ‘hedge’ también suman y siguen en el capital. AQR ha subido su posición corta hasta el 0,60%, después de que BlackRock aflorara el pasado 13 de marzo un 0,5% de las acciones. Presión en niveles récord para la filial de renovables de Acciona, que ha recuperado el soporte clave de los 20 euros.
“La presión sobre las eléctricas va a continuar. Los bancos están fuera del foco y también las constructoras, lo que hace que la energía sea el sector más atacable de todos”, señalan en una gran gestora nacional. No obstante, otros valores están viendo como la presión baja un poco. Es el caso del muy atacado Enagas, donde Marshall Wace ha soltado un poco el acelerador.