Un problema que se está viendo agudizado ante la avalancha de ofertas de compra de empresas extranjeras aprovechando el bajo precio de las cotizadas españolas, lo cual amenaza con menguar aún más el depauperado mercado español. A ello se suma la falta de nuevas incorporaciones a Bolsa en los últimos años, algo que se podría ver mitigado ligeramente si se cumplen las expectativas.
De momento, Applus y Ercros se encuentra ya en la puerta de salida, mientras el “free float” de Talgo se puramente representativo en caso de que un “cambio de opinión” de última hora que lleve a la exclusión de negociación de sus acciones.
Empresas estratégicas con pie y medio fuera del mercado
En el caso de Applus es cuestión de tiempo su salida del mercado a expensas del resultado de la guerra iniciada entre Amber, propiedad de los fondos ISQ y TDR, y el fondo estadounidense Apollo por hacerse con su control. La primera ha lanzado una oferta de 11 euros por acción con intención de excluir su cotización. La segunda, por su parte, ha elevado su oferta a 10,65 euros, pero cuenta con la ventaja de que ya controla el 21,85% del capital tras la firma de varios contratos de compraventa con accionistas de referencia y ha reducido sus condiciones a hacerse con algo más de un 50% del capital.
Ercros, si nada lo remedia, también tiene medio pie fuera de la Bolsa. La portuguesa Bondalti Iberica ha lanzado recientemente una oferta pública de adquisición (OPA) sobre Ercros a un precio de 3,6 euros por cada acción, lo que supone un valor total de 330 millones de euros.
El consejo de administración del grupo químico español señala que no tenía conocimiento de esta operación. Se trata, por tanto, de una oferta no solicitada y recuerdan que el precio ofrecido se encuentra muy por debajo, del orden de un 20%, respecto a los máximos de Ercros del año pasado. La operación, además, está en el aire ante la posibilidad de que el Gobierno español decida imponer el escudo anti opas al considerar estratégico al grupo químico español.
En esta misma situación estaría también Talgo tras recibir una oferta de compra de la totalidad de las acciones por parte del grupo húngaro Magyar Vagón a un precio de 5 euros por acción, unos 620 millones de euros en total. Aunque en este caso la operación si se ha considerado amistosa, el Ejecutivo español tampoco parece por la labor de permitir una operación con posibles intereses ocultos al estar patrocinada por el Gobierno húngaro con grandes vinculaciones con Rusia. La intención del grupo magiar es excluir las acciones de Bolsa, aunque se ha comprometido a mantener la sede en España y el empleo.
El mercado espera las nuevas incorporaciones con ilusión
Con dos históricos del mercado con pie y medio fuera y una tercera con una previsible merma del capital flotante, la única forma de BME para compensarlo es animar nuevas incorporaciones no tanto a los segmentos de crecimiento sino al mercado continuo.
La mejora de la Bolsa en las últimas semanas abre el apetito inversor ante posibles llegadas de nuevas empresas. Para ello, los expertos fijan dos grandes ventanas en que las condiciones suelen ser más favorables, la primavera y el otoño. Esta segunda ventana será especialmente favorable si se confirma la rebaja de tipos de interés, lo cual permitiría una mejora de las valoraciones.
Aun así, los operadores ya empiezan a hablar de las próximas incorporaciones. Quizás una de las más avanzadas podría ser el grupo de belleza Puig, una de las empresas familiares más fuertes de España con unas ventas superiores a los 3.600 millones de euros en 2023.
Especialmente proactivas para dar el paso sitúan a otras sociedades como la compañía de juegos Cirsa, una eterna candidata, la textil Tendam filial de Cortefiel, la empresa de restauración Restaurant Brands o la empresa de energía Calvera Hydrogen,
En primera línea de salida también se habla de Astara Mobility, la filial de grupo de automoción Bergé que podría incorporarse en abril con una valoración de unos 2.000 millones de euros, y Hotelseds, empresa de tecnología de viajes con sede en Palma de Mallorca y que considera la salida a Bolsa como su mejor opción tras descartar inversión privada por su escasa valoración.
A la espera de que se vayan confirmando estas incorporaciones, lo cierto es que el mercado español sigue siendo muy pequeño con cada vez menos peso en el contexto internacional, lo cual también pasa factura a su valoración.