“No se trata de salir del todo, ni de ponerse especialmente nervioso, pero sí de empezar a rebajar el nivel de riesgo, porque vienen acontecimientos lo suficientemente importantes como para prever que el último trimestre de 2024 será movido. Hemos decidido rebajar un 30% el valor de nuestra cartera de renta variable. Empezamos a recoger beneficios sin dejar de mirar oportunidades”.
La frase de un prestigioso gestor del mercado recoge la opinión de una gran mayoría de firmas En algunas, incluso, se da el año por prácticamente terminado. Con una subida acumulada del 17,5% en lo que va de año, el Ibex 35 lidera las ganancias entre los índices europeos gracias a la gran subida de los bancos y de tres pesos pesados como Inditex, Telefónica e IAG, todos ellos con avances superiores al 25%.
El selectivo español aspira a superar la ganancia del 22,7% del año pasado, pero algunos expertos aseguran que no es un objetivo fácil. “Hay cierta euforia porque los tipos de interés bajan aquí y en Estados Unidos, pero no hay que olvidar que en este último país hay unas elecciones en noviembre de resultado muy incierto y, sobre todo, que venimos de subidas muy potentes y, hasta cierto punto sorprendentes”, señalan en una gran gestora nacional.
No es baladí que el Ibex acaba de cerrar su tercer mes consecutivo de subidas salvando un mes tradicionalmente malo como septiembre con un saldo muy positivo gracias al impacto de las rebajas de tipos de este mes, que han sido sencillamente decisivas. La serie de ganancias de estos tres meses (en lo que el Ibex avanza 8,5%) no tiene parangón desde hace algo más de tres años.
El impacto de la caída del precio del dinero se irá diluyendo poco a poco en un mercado hasta cierto punto dopado también por el paquete de estímulos aprobado por China. Se han juntado muchos elementos a favor de obra en el tramo final de un gran trimestre para la renta variable, que ahora necesitará de nuevos catalizadores para seguir subiendo desde unos niveles que dan cierto vértigo a una amplia cuota de gestores.
“La temporada de resultados tiene que ser decisiva para que el Ibex y el resto de los índices (los americanos suman ganancias por encima del 20% en lo que va de año) puedan seguir creciendo. Hay cierto consenso en que la temporada de resultados será, en general, buena, pero hay algunas nubes en el horizonte que no conviene perder de vista. No descarto algunos sustos importantes”, señala un veterano bolsista.
Malos números de Puig
Por ejemplo, ahí están los inesperados malos números de Puig en sus primeras cuentas como empresa cotizada. O lo que está sucediendo alrededor del sector automovilístico. Stellantis ha rebajado sus previsiones drásticamente, y ahora prevé una generación negativa de flujo de caja de entre 5.000 y 10.000 millones de euros. Y Volkswagen prevé una caída de los ingresos cercana al 1%.
Antes, habían caído las advertencias de Mercedes y de BMW. Un toque de atención importante, un aviso de que no es oro todo lo que reluce en unos mercados que se enfrentan a grandes objetivos, como la superación de los 12.000 puntos en el caso del Ibex 35. En las dos últimas sesiones, el índice ha ofrecido signos evidentes de cansancio, justo antes del comienzo de un mes de octubre que históricamente es el más volátil del año.