Por encima ya de los 9.000 millones de euros de valor en Bolsa, ACS está rompiendo casi todos los pronósticos con una de las subidas más convincentes del Ibex 35. A diferencia de lo que ocurre con la de otros valores, la revalorización de ACS no es la respuesta a una gran caída anterior. Al contrario, porque el grupo que preside Florentino Pérez viene de un alza del 23% el año pasado y ha doblado su cotización desde 2015.
Los primeros sorprendidos son los analistas. La subida de ACS ha dejado desfasados la mayoría de los precios objetivos. La media del mercado se sitúa en torno a los 31,5 euros, por debajo de los 32 en los que el valor está consolidando sus nuevos máximos históricos. El mercado cree que -aunque por escaso margen- ACS ya no tiene potencial a un año vista. Pero el valor no da muestras de debilidad desde las alturas.
Freno a los bajistas
Malas noticias para los inversores bajistas, que siguen esperando una corrección que no llega. De momento, ni se avista. 'Hedge fund' como Millennium y Ako Capital atesoran en estos momentos el 1,8% del capital de ACS con posiciones cortas que fueron aumentadas el pasado mes de julio. De momento, no dejan de acumular pérdidas en un valor que está haciendo una extraordinaria demostración de fortaleza en bolsa.
"Hay una fuerte actividad de bajistas en el valor después de la subida constante de 2023. Pero algunos ya no pueden esperar y están deshaciendo sus posiciones para no engordar las pérdidas. Eso está contribuyendo -tienen que recomprar en bolsa las acciones que tomaron prestadas para su venta- a que la acción de ACS demuestre una resistencia tan grande a la baja", aseguran fuentes del mercado.
En las últimas semanas, ACS no ha dejado de encadenar noticias positivas que hacen que nuevos inversores a largo plazo tomen posiciones y que se retrasen las realizaciones de beneficios. Esta semana, el grupo ha comunicado la venta de un 7,3% de Ventia, el grupo australiano que controla su filial Cimic. La operación, realizada junto a su socio Apollo, le ha reportado unos ingresos de 98 millones de euros.
ACS, que se acaba de adjudicar la construcción de un puente en Nueva York por 128 millones de euros, mantiene una actividad corporativa frenética. El grupo ha reforzado su control en Hochtief hasta el 73% del capital. En los últimos meses se ha hecho con un 4% del capital en un proceso que está siendo aplaudido por el mercado, que está mostrando una confianza ciega en el valor desde la publicación de las cuentas del primer semestre del año.
Hasta junio, el grupo mejoró su beneficio neto casi un 17% hasta los 385 millones de euros, con crecimientos en todos los negocios del grupo, con concesiones al frente. Pero la noticia más impactante es que la cartera de pedidos ha alcanzado niveles récord de 72.484 millones de euros. Cifras que han dejado en segundo plano la deuda de 1.165 millones frente a la caja neta de 1.044 millones de julio del año pasado.