En los últimos meses, la socimi se ha mantenido en un proceso de consolidación por encima de la zona de soporte clave de 7,14, en espera de una mayor visibilidad. En el balance del año en Bolsa registra una caída de algo más del 6 %. Ambos factores llevan a pensar a los analistas que puede ser una buena oportunidad de entrada a los precios actuales.
Máxime si se confirma la posibilidad de que el Banco Central Europeo pueda estar cerca del tope del proceso de endurecimiento monetario iniciado el año pasado. El final del ciclo de subidas de tipos sería un catalizador al alza para el valor después de haberlo estado erosionando la valoración de sus activos estos meses atrás.
Un factor que a principios de esta primavera llevó a Morgan Stanley a rebajar su estimación de precio objetivo de 10 a 9,5 euros por acción. Pese al recorte, la firma le confiere un potencial superior al 15 % que le permitiría volver a terreno positivo. Expectativas que; junto a su alta rentabilidad por dividendo, superior al 5,5 %, y su bajo PER; convierten al valor en una interesante opción como inversión a medio y largo plazo.
Los analistas técnicos coinciden con esta opinión que puede resultar interesante ir tomando posiciones en los niveles actuales para añadir posiciones una vez supere los 9,45 euros por acción que tiene como principal barrera técnica en estos momentos.