En marzo del año pasado, el empresario mexicano ya realizó una oferta parcial dirigida a un máximo del 24 % del capital que apenas contó con la aceptación del 11,47 % del capital social. Un pequeño fiasco justificado por la escasa valoración realizada por aquel entonces al ofrecer 7,8 euros por acción con una prima del 20 % respecto al cierre de la sesión anterior. Un precio muy por debajo de las estimaciones de las grandes casas de análisis por aquel entonces.
Con todo, Slim ha continuado tomando posiciones en el capital de la sociedad desde el 17 % alcanzado tras esa opa parcial hasta el 20,2 % que controla en la actualidad. Por eso no parecen nada descabellados las especulaciones sobre una opa por la totalidad.
El problema podría estar en el desinterés de los bancos a la hora de vender si no llega una oferta extremadamente jugosa. Santander controla el 49,3 % del capital y BBVA el 20,8 %. Y en realidad se encuentran muy satisfechos y cómodos con su posición en Metrovacesa dado su potente modelo de negocio, con una alta flexibilidad para adaptarse a los cambios del mercado, su alta capacidad de gestión y el recurrente pago de dividendos, uno de los más altos del mercado.
Pese a un comienzo del año complicado, con unas pérdidas de 3,6 millones de euros entre enero y marzo debido a la fuerte caída tanto de los márgenes como del Ebitda, el grupo ha reiterado sus previsiones de generación de flujo de caja entre 100 millones y 150 millones de euros para el ejercicio y un objetivo de superar las 2.000 viviendas.
En cualquier caso, el mercado ha recogido con renovado optimismo la rumorología en torno al valor que esta semana ha reaccionado con alzas cercanas al 10 % que han impulsado su revalorización anual por encima del 16 %. Un avance que puede dar lugar a un cambio en las recomendaciones después de estar lastradas en un comienzo de año marcado por las incertidumbres legislativas del sector en España.