Uno de los más llamativos es el de los préstamos a empresas, que ya se sitúa claramente por encima del 4% (el 4,11% exactamente) al cierre del mes de marzo. Las compañías, que en el mismo mes del año pasado se estaban financiando al 1,26%, han visto como el precio de los créditos se ha más que multiplicado por tres en sólo 12 meses. Un rally de grandes dimensiones que, claro está, tiene consecuencias.
En los dos últimos meses de febrero y marzo, el volumen de las nuevas operaciones en créditos a empresas ha caído. En febrero el descenso fue de alrededor de 4.800 millones de euros respecto al mismo mes de 2022, y en marzo es de casi 2.300 millones. Cifras significativas que ponen de manifiesto hasta qué punto los bancos fueron más selectivos en la concesión en un contexto de creciente incertidumbre.
"Hay que tener en cuenta que marzo fue el escenario de la gran crisis financiera. Los bancos han adoptado una posición de mucha mayor cautela desde el rescate de Credit Suisse, y eso se ha notado en la segunda parte del mes. Con tipos por encima del 4% de media las propias empresas son menos proclives a solicitar créditos y, sin no tienen más remedio, intentan reducir el importe lo máximo posible", señalan fuentes del sector.
No hay lugar a dudas
Las cifras no dan lugar a las dudas. El precio de los préstamos de la banca a la empresas se han disparado un 22% sólo en lo que va de año, un poquito más de lo que lo han hecho las hipotecas, también por encima del 20%. El precio medio de las nuevas operaciones de préstamos para viviendas se encuentra ya en el 3,54%, un nivel no tocado desde hace más de una década que también está dejando fuera de juego a muchos potenciales firmantes de una hipoteca.
"Estamos viendo una caída pronunciada de la contratación en este primer tercio del año. Y es que a la fuerza tienen que impactar unos nuevos precios mucho más exigentes, sobre todo para las familias de clase media que no pueden amortiguar los costes con la contratación de otros productos como seguros o con la contratación de fondos de inversión o planes de pensiones. El mercado ahora es más reducido", señalan en una entidad mediana.
El ajuste de los precios llega también con enorme fuerza a una modalidad especialmente sensible como la de los préstamos al consumo. El tipo medio está ya a un paso del 8% (el 7,94% exactamente), frente al 7,13% al que empezó el año. Sólo en el primer trimestre el precio medio se ha expandido alrededor de un 11% hasta niveles no vistos desde 2014. La cuestión es si hay más subidas por delante en todos los segmentos.
"Resulta muy difícil hacer previsiones. Pueden quedar todavía un par de subidas de tipos del BCE, que en gran parte están descontadas si no van más allá de los 50 puntos básicos en total. Pero hay margen para la sorpresa. Lo que sí parece evidente es que la fuerte subida de 2023 se va consolidar en un escenario muy incierto como el actual", explican fuentes financieras.