Pasada la crisis Covid y post-Covid, la ralentización de la economía mundial y una de las mayores crisis aeronáuticas que se recuerda, con los cielos cerrados y, después, con la escalada de los precios de la energía (consecuencia de la guerra en Ucrania), el ejecutivo español sale por la puerta grande con una Iberia en beneficios que ha tirado del carro IAG con sus resultados y su buena evolución en todos los negocios cuando el gigante British Airways (la mayor aerolínea del conglomerado) aún intentaba remontar.
Sin embargo, Sánchez-Prieto no tendrá que ser quien defienda la compra de Air Europa ante la comisaria de la Competencia europea, la liberal danesa Margrethe Vestager que no ha tenido empacho en señalar su oposición a la operación. Los famosos ‘remedies’, las cesiones de líneas a otras compañías serán la clave de un proceso en el que, para IAG, el juego se realiza en un ‘tablero’ mayor que el del mercado español.
Para resolver la situación, IAG ha tirado de banquillo para relevarle, al menos para los próximos seis meses. El equipo de Luis Gallego se ha querido asegurar que Iberia mantendrá su estabilidad, la tranquilidad de su plantilla y se consolida como líder en cada negocio de los que desarrolla aparte del transporte propiamente dicho. Es el caso del handling (con importantes concursos en proceso por parte de Aena) o el Mantenimiento de motores y aeronaves, mercado en el que la compañía española ha sido históricamente un líder reconocido.
Para que nada cambie cuando todo funciona, el consejero delegado del conglomerado aeronáutico controlado por Qatar Airways, el español Luis Gallego, no ha dudado en ‘desprenderse’ de forma temporal de su estratega de cabecera.
Pero será, al menos en principio, algo temporal ya que IAG se ha dado de plazo hasta final de año para encontrar un sustituto a la altura de los retos que se le presentan por delante a la compañía aérea española.
El sustituto de Sánchez Prieto, a partir del próximo mes de julio, será Fernando Candela, el actual director de Transformación de IAG y consejero delegado de otra filial de IAG, la low cost, Level. Desde esa posición, Candela al que se le considera un hombre muy próximo a Luis Gallego, no solo ha definido la configuración, presente y futura, de IAG, sino que ha participado en la estrategia de compra de Air Europa.
Antes de sus actuales responsabilidades en IAG, Candela fue consejero delegado de Iberia Express y, antes, director de Planificación y Control de Gestión de la compañía aérea regional Air Nostrum.
Convencer a Bruselas
Ahora, como máximo responsable de Iberia, las ya anunciadas duras negociaciones con Competencia le corresponderán a él.
Como informó este diario, para Vestager, las dificultades que afronta el proyecto de compra de Air Europa por IAG a través de Iberia se deben exclusivamente a su eventual colusión con las normas de competencia económica y empresarial que rigen en la Unión Europea.
La Comisión estará en condiciones de anunciar los términos que impondrá para autorizar la compra de la sociedad que preside Juan José Hidalgo bastante antes de que finalice el actual periodo legislativo comunitario. La proximidad de las elecciones europeas calienta los ánimos de sus responsables políticos aunque, la planificación de las compañías se mantiene en que el proceso para conseguir que Bruselas de el visto bueno definitivo a la compra, se prolongarán dieciocho meses.
La designación de Candela busca asegurar que todo sigue como va: desde la propia marcha de la compañía que lleva mese aprovechándose de la recuperación el mercado, a las negociaciones con Bruselas. La incertidumbre sobre la evolución final que tome la economía mundial han puesto plomo en los pies de los gestores aeronáuticos de tofod el mundo. Por otra parte, la intempestiva salida de Javier Sánchez-Prieto, se produce según todas las fuentes consultadas, tras recibir una oferta profesional que "no ha podido rechazar" aunque sin concretar.