Entre los más optimistas con el laboratorio se encuentra Berenberg y Citigroup. En las últimas semanas, la firma alemana ha elevado su estimación de precio objetivo de 23,8 a 24,9 euros por acción. Este precio es más del doble de lo que cotiza en la actualidad. El banco de inversión estadounidense pese a recortar su valoración objetiva hasta los 22,3 euros, sigue considerando que el fabricante de plasma tiene una gran proyección a corto y medio plazo.
En cambio, en Bankinter se muestran mucho más prudentes. Recientemente han rebajado su precio objetivo de 16 a 11,25 euros por acción en línea con su cotización actual por lo que ha rebajado su recomendación de comprar a neutral.
Los analistas del banco creen que los resultados mostrados no manifiestan los catalizadores esperados como la reducción del gasto, la mejora de los márgenes o la contención del apalancamiento. Este último es uno de los factores que más preocupa. La ratio deuda neta sobre Ebitda se ha situado por encima de las nueve veces, algo excesivo en un momento de encarecimiento del crédito sin que los recortes de gastos se dejen sentir todavía en las cuentas.
Según las cifras presentadas, Grifols ha ejecutado más del 80 % de su plan de ahorro de 400 millones de euros en costes operativos anuales, que ha decidido ampliar a más de 450 millones. Este plan junto con la confirmación de la guía de ventas para 2023, con un crecimiento de digito alto, y del margen de Ebitda con un aumento entre el 22 % y el 24 % deberían ayudar a frenar el apalancamiento, pero eso es previsible que se prolongue en el tiempo.
En un escenario muy positivo, con la recuperación del suministro de plasma, la aportación a beneficios de las recientes compras y Biotest, la mejora de la eficiencia y la buena marcha del ajuste del plan de ahorro, Bankinter podría mejorar su valoración como mucho hasta los 13,10 euros por acción.
Por otro lado, en un escenario negativo marcado por el elevado apalancamiento, la ampliación de capital, bajos ingreso recurrentes y posibles conflictos de intereses con el accionista mayoritario podría llevar a la entidad ha recortar aún más su precio objetivo, hasta los 8 euros por título.
Un duro camino de espinas que también refleja el perfil técnico de Grifols. Las acciones del laboratorio han pasado de los 8,6 euros de marzo a moverse en torno a los 11,4 euros, pero en ese nivel parecen estar encontrando una seria resistencia que está frenando su rebote hacia los máximos de febrero. De no superar esta barrera en breve corre el riesgo de recaer con fuerza de nuevo.