La remuneración de los directivos del grupo se elevó a 1,1 millones de euros en 2022 frente al poco más de un millón cobrado un año antes. Según la información remitida a la CNMV, su consejero delegado percibió un sueldo de 756.000 euros, un 4,6 % superior a los 723.000 euros de un año antes.
Sin embargo, el beneficio de la multinacional aceitera española experimentó una caída de casi el 90 %, hasta los 6,26 millones de euros. Un descenso que sus responsables achacan a la incesante subida del precio del aceite de oliva en origen. En el segundo semestre llegó a registrar incrementos del 66 %, provocando una caída generalizada del consumo en la categoría.
A este factor, señalan, se ha sumado el alza de los precios de la energía derivados de la guerra en Ucrania, las turbulencias en la cadena de suministros, la inflación y la subida de tipos de interés. Motivos que no parecen ser suficientes para que el Consejo de Administración no haya sido algo más cauto con las subidas salariales. Máxime sabiendo de dónde viene la compañía y los duros sacrificios exigidos a los minoritarios.
No es de extrañar, señalan los más críticos, que la acción siga siendo incapaz de levantar cabeza. Deoleo se mantiene muy cerquita de sus mínimos tras mostrar un fuerte perfil bajista desde marzo de 2021 cuando alcanzó su máximo desde la reestructuración sobre los 0,4 euros por acción.