Los accionistas aprobaron también la decisión del consejo de distribuir el mayor dividendo de la historia de Iberdrola, 0,49 euros por acción, el 10% más que lo retribuido un año antes. La cifra incluye el llamado ‘dividendo de involucración’ (0,005 euros) de 0,005 euros por título, al haberse superado el 70% de asistencia a la junta general. La remuneración al accionista se completa con un nuevo programa de recompra de acciones para mantener estable el capital en circulación en 6.240 millones de acciones.
La reelección de Galán en la presidencia ha sido mejor recibida por la asamblea al escuchar el compromiso del presidente que ha anunciado récords de beneficio y de dividendo para dentro de dos años.
Galán defendió ante la junta el plan estratégico de la compañía, en el que espera beneficios récords que superen "ampliamente" los 5.000 millones de euros en 2025, el 25% por encima de los que acaba de aprobar. Eso supone un alza en los dividendos en línea con los resultados.
El presidente de Iberdrola ha asegurado que el plan estratégico 2023-2025, presentado en noviembre, supone dar un "salto de gigante" y permitirá acelerar el compromiso récord de inversión de 47.000 millones de euros para este período. Especialmente porque, según sus previsiones, la demanda eléctrica mundial puede duplicarse en los próximos 20 años, por lo que -dijo- serán necesarias inversiones superiores a los 25 billones de euros, "consolidando" al sector eléctrico como agente "clave" para la actividad económica y la creación de empleo.
La sede no se mueve
Tras defender y subrayar el compromiso de Iberdrola con el País Vasco, Galán envió un mensaje de tranquilidad, porque van Iberdrola seguirá en el territorio. Pese a su potente internacionalización que la vincula muy especialmente con territorios y países como Escocia, Inglaterra o Estados Unidos, el ejecutivo ratificó el carácter vasco y español de la compañía que seguirá en el territorio. "Estén tranquilos, que estamos aquí y vamos a seguir aquí", dijo.
"Pueden estar seguros de que esta empresa ha estado 120 años comprometida con esta tierra y seguirá, por lo menos, 120 años más", aseguraba Galán ante sus accionistas. Para subrayar el efecto, Galán refirió la contribución de Iberdrola a la economía vasca que, según sus cálculos, representa alrededor el 2,5% del PIB, con unos 2.700 millones de euros a través de inversiones, compras y contribución fiscal.
Las declaraciones (y la decisión) sobre la permanencia de la compañía en el Euskadi llegan después de que Ferrovial haya aprobado su traslado de España a Países Bajos.
Durante el encuentro, el presidente de Iberdrola se ha referido a 2022 como un año "récord" para la empresa, que con su estrategia ha alcanzado niveles máximos "de inversión, fortaleza financiera, expansión internacional, resultados, contribución social, empleo y reducción de emisiones". Y ello, en un contexto global de "cambios e incertidumbre", marcado por las "intervenciones regulatorias" adoptadas por los altos precios de las materias primas energéticas, "que también han afectado al sector eléctrico, aunque no fuera responsable ni beneficiario" de dicha situación, ha añadido.
Primer dividendo flexible
El orden del día también incluía la ratificación del nombramiento de Armando Martínez como consejero, y su reelección, por cuatro años, con condición de ejecutivo. el nombramiento de Armando Martínez como consejero delegado, anunciado el pasado octubre.
Además de reelegir al presidente y al primer ejecutivo, los accionistas de Iberdrola han votado la continuidad de cuatro consejeros: Manuel Moreu, Sara de la Rica y Xabier Sagredo, como independientes; y María Helena Antolín, como externa.
Las compañía ha puesto en marcha su primer dividendo opcional, denominado ‘Iberdrola Retribución Flexible’ para 2023. El nuevo sistema permite al accionista elegir entre cobrar su dividendo en acciones nuevas totalmente liberadas, vender todos o parte de sus ‘cupones’ en el mercado, o recibir su retribución en efectivo; además de poder usar una mezcla de todas ellas.
Paralelamente, Iberdrola, previo visto bueno de la Junta, ha lanzado su programa de recompra de acciones, que estará en vigor hasta el 20 de junio. Según lo aprobado en junta, Iberdrola podrá adquirir hasta 42 millones de accione (el 0,652 % del capital) por un importe máximo de 588 millones de euros.