En virtud del acuerdo alcanzado el pasado mes de febrero, estos dos socios industriales mexicanos asumían el compromiso conjunto de otorgar dos préstamos al grupo asturiano por un importe total de 90 millones de euros.
Un plan de viabilidad que ahora ha tenido el visto bueno por parte del Consejo de Ministros después de que la compañía fuera receptora de 120 millones de euros de dinero público de forma temporal con cargo al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas (FASEE).
La autorización forma parte del proceso de incorporación de un socio industrial, sobre el cual pivotan los objetivos del plan de viabilidad actualizado al que se había comprometido la compañía tras la obtención de la ayuda pública.
La entrada de fondos aportados a través de los inversores va a permitir incrementar el negocio de la compañía, generar valor y aportar solvencia y liquidez. Para llevar a cabo la operación en los términos previstos en la hoja de ruta de la compañía, será necesario a su vez la autorización para la exención de OPA por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), prevista por la ley sobre el régimen de las ofertas públicas de adquisición de valores. Una vez obtenida la exención, y cumplidos los demás requisitos legales, se ejecutará la ampliación de capital.
Un cambio de cara que el mercado empieza a recoger de forma favorable. Su revalorización en el acumulado del año se acerca al 20 %, pese a la recogida de beneficios de las últimas sesiones. Todo un alivio después de tantear mínimos históricos en marzo de 2020. Una reacción que ahora despeja su camino para recuperar el euro donde encuentra su principal resistencia en la actualidad.