En cualquier caso, sobre el grupo sigue pesando las incertidumbres dejadas por la pandemia con unos clientes que se han habituado a realizar reservas de “último minuto”, aunque ya se empieza a sentir una mejora de las reservas para el verano. El temor a que los hoteles se llenen, incluso con precios más elevados, está incentivando las reservas; lo cual le ha permitido alcanzar ya niveles similares a los de 2019.
Respecto al turismo urbano, más de negocios, la cadena hotelera sigue echando en falta la reactivación de los eventos y las ferias a niveles previos a la pandemia. Una buena piedra de toque será el Mobile Word Congress que se celebra este fin de semana en Barcelona y que ha generado grandes expectativas después de años muy duros.
Uno de los grandes problemas para Meliá, sin embargo, sigue siendo el actual entorno de inflación persistente. Todas las partidas de gastos están experimentando subidas. Este incremento podría comprometer los márgenes y presionar el Ebitda. Eso está obligando al grupo a adoptar previsiones más conservadoras.
Con todo, las perspectivas de negocio son muy positivas. Algo que según los expertos de Renta 4 empezará a reflejarse ya en su cuenta de resultados correspondiente a 2022 cuya presentación se realizará el próximo lunes. No en vano, la firma de inversión ha reiterado su recomendación de sobreponderar el valor con un precio objetivo de 7,5 euros por acción, lo cual supone un potencial de subida del orden del 20 % desde su actual precio de mercado.
Estos expertos valoran en especial el acuerdo con los hoteles Tryp mediante la fórmula de gestión que le aportará 17 hoteles y más de 2.700 habitaciones. El grupo prevé que el acuerdo entre en vigor en el segundo trimestre y que tenga un importante impacto positivo en sus cuentas en la segunda mitad del ejercicio. En un año bueno estos hoteles podrían aportar 100 millones en ingresos, 30 de Ebitda y 4 de beneficio neto.
Cifras muy jugosas que explican en buena medida la subida de más del 30 % de la cotización desde comienzos del ejercicio. La acción, sin embargo, parece haber frenado el rebote ante la resistencia que encuentra en las inmediaciones de los 6,2 euros por acción. Esta cota condicionará la evolución del valor en el corto y medio plazo. Si la supera en breve se iría por encima de los 7 euros, pero en caso contrario podría dar un paso atrás de aproximadamente un euro para recuperar fuerzas.