Uno de esos negocios es el reciclaje de las baterías de iones de vehículos eléctricos. Para ello, Sacyr Concesiones está liderando el proyecto Baterurgia en un consorcio donde también participan Sacyr Fluor, Tubacex, Ferroglobe y Colorobbia, y tres pymes, Recyclia, Little Energy y Coveless.
El objetivo es desarrollar tecnologías avanzadas para el estudio de las baterías que han finalizado su vida útil, el desmantelamiento de las celdas no recuperables y la recuperación de los metales críticos. Todo ello con una tecnología basada en robótica, visión artificial, e innovadores procesos metalúrgicos destinados a facilitar y mejorar los niveles de recuperación para la purificación de la masa negra y la extracción de los diferentes materiales estratégicos.
Se trata, por tanto, de resolver los problemas derivados de la recuperación y separación selectiva de los metales críticos que llevan incluidos las baterías de litio. Estos materiales pueden ser utilizados para la fabricación de nuevas baterías o sustituir a materias primas convencionales e introducirse en otros sectores productivos en un proceso de economía circular más acorde con los actuales criterios de sostenibilidad.
Actualmente, en España el reciclaje químico de baterías de vehículo eléctrico es un reto industrial que tiene un elevado potencial para sentar las bases en el futuro desarrollo de una o varias plantas donde se materialice este proyecto. No en vano, la reutilización de los metales críticos en la fabricación de nuevas baterías se considera una tarea estratégica teniendo en cuenta que en la Península Ibérica habrá, en un futuro inmediato, varias plantas de fabricación de baterías de VEs.
Una excelente oportunidad para que el grupo pueda salir del profundo pozo en el que llegó a estar tras la pandemia. Desde marzo de 2020, cuando llegó a cotizar a poco más de 1,2 euros, el precio de sus acciones casi se ha multiplicado por tres. Tanto es así que su cotización se mueve en su nivel más alto de casi una década.
Por su parte, una vez finalizado el análisis del plan de desinversiones anunciado mediante comunicación de fecha 5 octubre de 2022 y tras las muestras de interés recibidas en relación con la división de servicios, la Sociedad comunica que realizará un proceso de venta por separado de Valoriza Facilities y Valoriza Servicios Medioambientales. En el primer caso, se contempla la desinversión de hasta el 100% y en el segundo del 49%, aunque Sacyr se reserva la posibilidad de analizar ofertas por un porcentaje superior.
Y, lo mejor de todo, con una clara proyección alcista gracias a unos resultados cada vez más convincentes gracias, sobre todo, a la positiva evolución de las ventas y de la cartera., aunque con niveles de deuda aún excesivos.