El Congreso debería ordenar al Tesoro de los Estados Unidos que valore sus tenencias de oro a precios de mercado, aseguran Paul H. Kupiec y Alex J. Pollock. Esto permitiría ingresar fondos suficientes para pagar las cuentas de este año.
“El precio de mercado actual del oro es un poco más de 1.875 dólares por onza . Hacienda posee alrededor de 261,5 millones de onzas de oro, lo que suponen más de ocho toneladas. Debido a que la Ley de Reserva de Oro, modificada por el Congreso en 1973, requiere que el Tesoro de los EEUU valore su oro en 42,22 dólares la onza, el Tesoro valora sus tenencias de oro en un poco más de 11.000 millones de dólares, mientras que el valor real de mercado de su oro es de aproximadamente 490.000 millones de dólares”.
Esta no sería la única forma que tendría el Tesoro norteamericano para aprovechar sus tenencias de oro. Dispone de autorización para emitir certificados de oro. En su momento ya hizo uso de esta posibilidad cuando emitió 11.000 millones en este tipo de “papel”, aunque lo hizo al desfasado precio de 42,22 dólares la onza.
Cinco palabras
“Para monetizar el valor de mercado de las tenencias de oro del Tesoro, el Congreso solo necesita reemplazar cinco palabras en la Ley de Reserva de Oro. Reemplazar “42 dólares y dos novenos” con “el valor de mercado actual (según lo determine el Secretario en el momento de la emisión)”, lo que permitiría al Tesoro utilizar casi 480.000 millones en dólares gastables sin aumentar el límite de deuda actual”, aseguran los expertos.
Paul H. Kupiec es académico residente en el American Enterprise Institute. Es ex director del Centro de Investigación Financiera de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos y ex presidente del Grupo de Trabajo de Investigación del Comité de Supervisión Bancaria de Basilea. Paul H. Kupiec es académico residente en el American Enterprise Institute. Es ex director del Centro de Investigación Financiera de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos y ex presidente del Grupo de Trabajo de Investigación del Comité de Supervisión Bancaria de Basilea.
“Simplemente reconociendo la realidad, este cambio le daría tiempo al Congreso para negociar, en orden regular, un presupuesto bipartidista para el año fiscal 2024 con recortes de gastos, y aprobar un nuevo techo de deuda de tamaño apropiado para la financiación del gobierno en el año fiscal 2024 y más allá”, indican estos expertos.