Este es el caso, por ejemplo, de Air India que está a punto de cerrar un pedido histórico de aviones a los principales fabricantes mundiales por valor de miles de millones de dólares. Y Airbus está a la cabeza para recoger este nuevo impulso después de liderar el sector en los últimos años.
El pasado mes de diciembre, además, el Consejo de Ministros de España autorizó al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo la concesión directa de dos préstamos al consorcio europeo para financiar la participación española en los programas de helicópteros Tigre MK III y los drones Euromale RPAS por un importe total de 2.137 millones de euros. Estos programas se desarrollarán hasta 2028.
El creciente aumento de pedidos, sin embargo, podría convertirse en un serio problema para el grupo si no resuelve de forma satisfactoria los posibles cuellos de botella. De hecho, los problemas de suministros sufridos durante 2022 han obligado a la compañía a ralentizar la producción y a ajustar los procesos.
Medidas destinadas a hacer frente a sus compromisos tras superar una cartera de pedidos de 7.000 unidades en julio del pasado año. Este es precisamente uno de los principales desafíos a los que se enfrenta en el nuevo año.
Con todo, la gran mayoría de los analistas siguen confiando en la capacidad del grupo para superar estos desafíos. Entre las últimas recomendaciones se encuentra la mejora del precio objetivo por parte de Jefferies de 132 a 135 euros por acción. Este precio implicaría superar sus máximos históricos previos a la pandemia con un potencial alcista cercano al 20 % desde su actual precio de mercado.