El alivio de la subida de los precios en julio respondió a la moderación del encarecimiento de la energía al 32,9% desde el 41,6% de junio, mientras que en el caso de los alimentos la escalada de los precios se aceleró al 10,9% desde el 10,4% de junio, el mayor aumento desde mayo de 1979.
Sin tener en cuenta el impacto de los alimentos y de la energía, la tasa de inflación subyacente de Estados Unidos en julio fue del 5,9%, en línea con el dato del mes anterior.
En comparación con el mes de junio, la tasa mensual de inflación se mantuvo estable, después de que el mes pasado registrase un incremento mensual del 1,3%.
El pasado 27 de julio, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) elevó los tipos de interés del país en 75 puntos básicos, hasta un rango objetivo de entre el 2,25% y el 2,5%, su mayor nivel desde diciembre 2018.
También en Alemania
La tasa de inflación interanual de Alemania se situó el pasado mes de julio en el 7,5%, lo que supone una reducción de una décima respecto del 7,6% correspondiente a junio y de cuatro décimas en comparación con el 7,9% de mayo, acumulando así dos meses consecutivos de moderación en la escalada de precios, gracias a las medidas de alivio implementadas por el Gobierno del país, incluyendo descuentos en los transportes públicos y el combustible, según ha confirmado la Oficina Federal de Estadística (Destatis).
"La principal razón de la alta inflación sigue siendo el aumento de los precios de los productos energéticos", señaló Georg Thiel, presidente de la Oficina Federal de Estadística, después de que los precios de la energía en Alemania subieran un 35,5% en julio, frente al 38% de junio.
En particular, Thiel destacó el "ligero efecto a la baja en la tasa de inflación" de la introducción de un abono transporte temporal al precio reducido de 9 euros y del descuento en el precio de los combustibles, además de la eliminación en julio del recargo EEG.
De este modo, la supresión de este recargo en la factura permitió que el aumento interanual de los precios de la electricidad en julio fuera del 18,1%, frente al 22% de junio, mientras que los descuentos en los precios del combustible limitaron el incremento de los precios al 23% desde el 33,2% de junio. Además, los precios del combustible para calefacción aumentaron un 102,6%, incluyendo una subida del 75,1% del gas.
De su lado, los precios de los alimentos aumentaron un 14,8% interanual en julio, tras la subida del 12,7% de junio. Se registraron aumentos de precios para todos los grupos de alimentos, incluyendo un alza del 44,2% de los precios de las grasas y aceites comestibles y del 24,2% del precio de los lácteos y los huevos, mientras que la carne y los productos cárnicos se encarecieron un 18,3%.
Excluyendo los precios de la energía, la tasa de inflación de Alemania se situó en el 4,4% en julio, mientras que la tasa subyacente, que deja fuera del cálculo también a los alimentos, situó en el 3,2%.