Kirkbi y Sony irán al 50% en la inversión, aportando 1.000 millones cada una. La japonesa es ya una vieja conocida en las rondas de financiación de Epic Games, en la que ha puesto 450 millones de dólares en los últimos dos años. Con este nuevo paso, la apuesta del gigante nipón por el Metaverso parece clara, después de que ya diera indicios con la compra de Bungie, desarrolladores del éxito 'Destiny'.
Por su parte, Epic Games ha ido ganando un considerable prestigio dentro del mundo virtual gracias a pelotazos como 'Fortnite' y, sobre todo, a la enorme influencia de su motor de desarrollo 3D Unreal Engine. Precisamente, éste último ha sido señalado por Kenichiro Yoshida, CEO de Sony, como uno de los productos a los que potenciará la inversión.
Diversión, creación, comercialización
Los planes de Epic Games, según su CEO y fundador Tim Sweeney, pasan por aprovechar la financiación para acelerar la consetrucción de un metaverso "donde los jugadores puedan divertirse con sus amigos", los creadores de contenidos "prosperar" y las marcas ofrecer a los usuarios experiencias inmersivas.
Esta compañía, cuya facturación supera los 5.000 millones de dólares, ha tenido un considerable salto en su cotización: ha subido un 10% respecto a la valoración del año pasado, hasta llegar a los 31.500 millones de dólares, según informó la compañía tras la operación.
El mundo del mañana
El Metaverso es un espacio comunal generado por ordenador en el que sus usuarios, encarnados en avatares virtuales, pueden interactuar entre ellos y con los elementos del mapeado. La idea es trasladar la existencia cotidiana a un mapeado tridimensional, incluyendo el trabajo y el emprendimiento, pero sin límites físicos. En los últimos meses, la práctica totalidad de los actores importantes del ámbito tecnológico han manifestado de una forma u otra sus planes respecto a esta nueva dimensión de negocio.
La alianza financiera entre Epic, Sony y Kirkbi se produce poco después de que Microsoft anunciara la compra de la desarrolladora de videojuegos Activision Blizzard por casi 69.000 millones de dólares. Con esta adquisición, la mayor jamás realizada en el sector del ocio digital, el coloso del software pretende sentar las bases de su presencia en el Metaverso.