Desde hace un año, la siderúrgica ha estado realizando planes similares de recompra para mejorar la rentabilidad de las accione en los que la familia india participaba con las ventas necesarias para mantener su porcentaje de control en torno al 36,3%.
Con este objetivo, el pasado 11 de febrero, la sociedad anunciaba un nuevo programa de recompra de acciones por valor de 1.000 millones de dólares. Programa aprobado por este accionista de referencia con la intención de proceder, como había hecho hasta ahora, a la venta de acciones a la sociedad de manera proporcional al número de acciones recompradas en el mercado con el fin de mantener invariado su porcentaje de participación accionarial.
No obstante, una vez en marcha este último programa, los Mittal han optado por notificar a ArcelorMittal su decisión de no efectuar tales ventas. En consecuencia, su porcentaje de participación en el capital social emitido y en circulación se incrementará a medida que se vaya ejecutando el programa de recompra de acciones.
La estrategia de vender acciones a la sociedad sin modificar su porcentaje de control había reportado a la familia Mittal una jugosa cantidad de 340 millones de euros en el último año. Un plan que ha decido cambiar ahora en un escenario de crecimiento de la demanda y encarecimiento del precio del acero.
De hecho, Arcelor Mittal obtuvo un beneficio neto superior a los 13.000 millones de euros al cierre de 2021, frente a las pérdidas de 641 millones de euros contabilizadas un año antes. Un crecimiento que la familia india quiere aprovechar ahora al máximo.
Así lo recoge también el mercado. Desde que se anunció esta decisión, la acción se ha disparado cerca de un 20%, superando los 30 euros por acción. La consolidación de una posible nueva fase alcista, sin embargo, queda pendiente de superar los máximos en cerca de 33 euros marcados a principios de año.