Solaria está presente con plantas fotovoltaicas en Italia desde el año 2010, pero ha querido dar un paso más con la apertura de esta nueva sede, situada en la zona financiera de Roma. Esta le permitirá asentar su expansión internacional y contribuir a la consecución de los objetivos de su plan estratégico: alcanzar 3 GW de potencia instalada en Italia para 2030.
Esta inauguración pone de manifiesto la apuesta de Solaria por el mercado italiano, uno de los principales junto con España y Portugal. En esta nueva oficina trabajan una decena de empleados italianos y la compañía continuará aumentando el equipo en los próximos meses.
Para Stefano Bisceglia, Head of Italy, este paso supone estar más “cerca de nuestros proyectos para poder gestionarlos de manera integral, innovadora y sostenible”. Algo fundamental para sacar el máximo provecho de uno de los mercados europeos con mayor potencial de crecimiento en energía limpia.
El grupo español, en cualquier, caso siguen penalizado en el mercado antes las incertidumbres que rodean al sector como la cuestión regulatoria o los altos precios de la electricidad.
Las acciones de Solaria pierden cerca de un 20% en el acumulado de año, llegando a poner en serio riesgo el suelo que encuentran en las inmediaciones de los 13,5 euros. De acentuar su actual tendencia bajista y rompiera a la baja este nivel se abriría un peligroso gap bajista adicional con el siguiente soporte en torno a los 10 euros.