En este sentido, los expertos recuerdan que 2022 está demostrando ser un ejercicio más difícil para el mercado de valores que para la propia economía. Incluso teniendo en cuenta la ralentización experimentada por el crecimiento debido a la inflación y la subida de tipos, la solidez del mercado laboral tanto en Estados Unidos como en Europa, en zona de mínimos históricos, ha servido para amortiguar los problemas.
No obstante, las expectativas para los próximos trimestres presagian un camino aún más accidentado y lleno de obstáculos, sobre todo en lo que se refiere a los resultados empresariales. Conviene recordar que uno de los principales objetivos de las subidas de tipos es debilitar la demanda para contener los precios, lo cual eleva el riesgo de entrada en recesión.
El giro en la curva de rendimiento del Tesoro en Estados Unidos, con las tasas a corto plazo generando una rentabilidad superior que las tasas a largo plazo, es un claro signo del complicado entorno al que se enfrenta la economía norteamericana en los próximos trimestres y que afectará también a Europa, aunque con algo más de retraso al reaccionar más tarde ante la subida de la inflación.
En cualquier caso, tal y como apuntan la mayoría de los analistas, la recesión parece que será menos profunda y duradera de lo que se temía a finales del verano. Eso dará cierto margen de recuperación a la renta variable en esta recta final del ejercicio y el arranque del nuevo año, aprovechando unas valoraciones que, en especial entre los grandes valores, siguen siendo muy atractivas.
Calendario semanal de Bolsa
Los datos de inflación, actividad, confianza y producción se cuelan en una semana que vendrá marcada por la última reunión del año tanto de la Reserva Federal como del Banco Central Europeo, de las que los analistas esperan nuevas subidas de tipos. Aunque estas podrían ser menos agresivas que en ocasiones anteriores.
Este lunes, de momento, los inversores deberán estar atentos a la producción industrial y el PIB en el Reino Unido, que podría seguir reflejando la ralentización de la economía inglesa, mientras que ni en la Europa continental ni en Estados Unidos se esperan referencias relevantes para el mercado.
En la sesión del martes el foco seguirá puesto en las Islas Británicas donde se dará a conocer los datos de empleo. Esta vez, además, se espera también el IPC y el índice de confianza ZEW en Alemania, así como el IPC de Estados Unidos que suele tener un alto impacto en los mercados con la mirada puesta en los tipos de interés
En este sentido, el miércoles, la atención estará puesta en la reunión de la Reserva Federal con la perspectiva que suba sus tipos de interés en 50 puntos básicos hasta las inmediaciones del 4,5 %. Esta decisión, sin embargo, de dará a conocer ya con los mercados europeos cerrados. Antes, los inversores tendrán que digerir la encuesta Tankan y la producción industrial en Japón, El IPC y los precios de producción en el Reino Unido, el IPC de España y la producción industrial de la zona euro, Mientras que desde Estados Unidos llegarán además el índice hipotecario MBA, así como los precios de importación y exportación.
En la agenda financiera internacional del jueves también habrá algunas citas importantes como la balanza comercial de Japón, las ventas minoristas y la producción industrial de China o los precios al por mayor en Alemania. Aunque el foco estará puesto en la decisión sobre política monetaria tanto del Banco Central Europeo como del Banco de Inglaterra de los que se esperan subidas de medio puntos respectivamente.
En Estados Unidos se darán a conocer también las ventas al por menor, el índice de la Fed de Filadelfia, el índice de la Fed de Nueva York, la producción industrial, la capacidad de utilización y los inventarios de negocios.
Una semana muy intensa que se cerrará el viernes con el índice de confianza consumidora y las ventas al por menor en el Reino Unido, el IPC y la balanza comercial de la zona euro, así como con los indicadores de actividad PMI del sector manufacturero en las principales economías del mundo.