Las dos entidades informaron del inicio de las negociaciones el pasado 17 de mayo y han culminado hoy con la firma del acuerdo entre Lluís Alsina, consejero director general de MoraBanc, y César González-Bueno, consejero delegado de Banco Sabadell.
La formalización de la operación está condicionada a la autorización previa de la Autoridad Financiera Andorrana (AFA) y, una vez obtenida, previsiblemente en otoño, MoraBanc hará extensiva la oferta de compra al resto de accionistas en los mismos términos económicos acordados con Banco Sabadell.
Con esta operación, MoraBanc puede convertirse en la entidad líder en el mercado andorrano con respecto a las principales magnitudes de negocio en el mercado doméstico, así como la cifra de beneficios de los bancos andorranos. En relación con el consolidado, el grupo MoraBanc pasaría a gestionar más de 10.500 millones de euros en recursos de clientes, 1.600 millones de euros de inversión crediticia y mantendría unas ratios de rentabilidad y solvencia líderes en Andorra.
El consejero director general de MoraBanc, Lluís Alsina, valora que:
"Esta operación nos permitirá ganar cuota de mercado en Andorra, nuestro mercado principal, para dar valor a nuestros clientes y a los accionistas que creen en el país y en sus oportunidades. Un banco más fuerte nos ayudará a mantener el compromiso con el crecimiento de Andorra, así como el desarrollo de los proyectos de las personas y de los negocios.
Hemos hecho esta operación relevante gracias al compromiso de nuestros empleados, y esperamos muy pronto dar la bienvenida a los nuevos clientes y colaboradores para hacer juntos un banco más fuerte y mejor".
La compra de la participación mayoritaria del BSA se enmarca dentro de la estrategia de crecimiento de MoraBanc. En el último ejercicio, el beneficio de MoraBanc creció un 20 % hasta los 30,1 millones de euros, los recursos de clientes un 6,5 %, y también mejoró aún más su solvencia hasta el 25,5 % (CET1 fully loaded) y la rentabilidad hasta el 9,47 % (RoE). En los últimos 4 años, MoraBanc ha tenido una línea ascendente gracias a la transformación de la entidad, las inversiones en banca digital y la profesionalización de los órganos de gobierno.