El presidente, José Ignacio Goirigolzarri, ya adelantó que el cambio de marca se inicia este fin de semana en las principales sedes del nuevo grupo.
El presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri, y el consejero delegado, Gonzalo Gortázar, han formalizado hoy la creación del nuevo banco en la sede social de Valencia. Como han precisado ambos, por delante tienen ahora mucho trabajo hasta que se culmine la operación total, con la integración tecnológica a finales de año.
El consejero delegado se ha comprometido a que el ajuste de plantilla se hará de manera no traumática. "Los criterios de la reestructuración es que primen la voluntariedad y la meritocracia", ha defendido Gortázar.
"Esperamos empezar las conversaciones a la vuelta de la Semana Santa. Los detalles los hablaremos primero con los representantes sindicales. Nos gustaría cerrar un acuerdo a final del segundo trimestre", ha añadido el consejero delegado.
Esta negociación para el ajuste de plantilla no es la única que se afrontará en las próximas semanas. Tras el registro oficial del nuevo banco, el consejero delegado también prevé iniciar conversaciones con Mapfre para poner punto y final a la alianza estratégica que Bankia tenía con el grupo asegurador desde la época de Caja Madrid.
CaixaBank cotizará como una única entidad desde el próximo lunes y el nuevo consejo de administración se reunirá el martes, según ha indicado José Ignacio Goirigolzarri que, oficialmente, tendrá que ser ratificado como presidente en dicha reunión.
Cambio de marca
Uno de los pasos más inmediatos se producirá este fin de semana con el cambio de marca en los principales edificios del nuevo grupo bancario. Goirigolzarri calcula que el cambio en las sucursales se alargará hasta junio o julio y ha reiterado el compromiso, también requerido por el CNMC, de permanecer en los 290 municipios en los que CaixaBank sea la unica entidad bancaria.
En este sentido, el presidente ha rechazado que la fusión de CaixaBank y Bankia suponga una merma de la competencia en el sector bancario español. "El nivel de competencia no ha disminuido en absoluto tras toda la consolidación. El sistema bancario ha dejado de ser un ecosistema. Hoy las barreras de entrada en el sector financiero están bajando, con la entrada de otros competidores".
En paralelo con la integración tecnológica, Gonzalo Gortázar ha indicado que la política comercial tenderá a una convergencia a lo largo del año, con el lanzamiento de algunos productos nuevos y comunes, aunque por el momento se mantendrán las estrategias de los dos bancos que crean el nuevo grupo.
Tanto Goirigolzarri como Gortázar han descartado por el momento entrar en nuevas operaciones corporativas, tanto en España como en otros países. Sobre el salto internacional, el consejero delegado ha recordado su presencia en Portugal mediante BPI que no se verá afectado por la fusión.
El presidente de CaixaBank ha indicado que, una vez que se cierre la integración total a finales de año, será el momento de encarar un nuevo plan estratégico que, previsiblemente, se conocerá a finales del primer trimestre de 2022.