Según el 'Informe Global de Fusiones y Adquisiciones 2021' de Bain & Company, la venta de negocios no esenciales representó el 70% de las operaciones del sector en los últimos cinco años, unas desinversiones que alcanzaron un valor de más de 1.000 millones de dólares. ¿Las razones? La presión sobre los beneficios debido al entorno de bajos tipos de interés y el incremento de los requerimientos de capital. Este entorno ha provocado que en EE.UU. las compañías cuestionaran los modelos multilínea que no brindan claras ventajas de distribución. Y en Europa, lo que se replantearon fueron los beneficios de la diversificación geográfica.
Ejemplos hay en todas partes. Aviva vendió su negocio de Singapur y Aviva Vita de Italia; AXA completó la venta de sus negocios de Polonia, República Checa y Eslovaquia a Uniqa en octubre de 2020; AIG separó su negocio de Vida y Ahorro para crear una estructura corporativa más simple y establecer dos compañías independientes líderes en el mercado. La mutua británica Mutual insurer Liverpool Victoria Financial Services (LV=) vendió sus operaciones de Autos y Hogar a Allianz en 2019 y, un año después, anunció su venta a Bain Capital.
Esto por el lado de los vendedores, por el de los compradores los objetivos son similares: centrarse y crecer en su negocio core y ahorrar costes gracias a las sinergias. Según los datos que facilita el informe, el movimiento más importante de 2020, y quizá el más representativo, fue la oferta de 30.000 millones de dólares puesta sobre la mesa por Aon para comprar Willis Towers Watson. Una operación que creará el mediador más grande del mundo y generará 800 millones en ahorros: “Si el acuerdo supera el escrutinio regulatorio, las desinversiones que serán necesarias realizar generarán oportunidades atractivas en el mercado”.
La industria no puede dar la espalda a los cambios y a la rápida evolución que se está produciendo en el negocio asegurador azuzada por la transformación digital. Hay que mantenerse al día, y para lograrlo las entidades están buscando a través de inversiones y alianzas acceder a nuevas capacidades. Algunos ejemplos. AIA se asoció con ZA Tech para construir nuevas soluciones digitales más rápidamente, además de invertir y aliarse con actores en el ámbito de la salud y el bienestar; y Prudential Corporation Asia mejoró su aplicación de salud digital Pulse a través de una asociación con PAI Health.
Durante 2021, los expertos de Bain & Company pronostican que las tendencias observadas se mantendrán. Es decir, las aseguradoras seguirán fortaleciendo su posición en el mercado en los negocios core y buscando alianzas para acceder a las nuevas capacidades una vez que se identifiquen claramente cuáles de ellas son tendencias de futuro y les ayudarán a competir mejor y obtener ingresos y cuáles son una moda pasajera.
En este ámbito hay que poner el foco en el mercado de las insurtechs, que ha generado gran interés en el sector: las inversiones sumaron en 2020 más de 7.000 millones de dólares frente a los 6.300 millones de 2019. El pasado año se produjeron varias OPI destacadas, como la de Lemonade y Root. Y la tendencia continúa.