Los últimos estudios sobre ómicron apuntan a que esta variante de la covid es mucho más contagiosa, pero también mucho menos dañina. Se reducen así los riesgos a nuevos confinamientos y a nuevos parones en la actividad económica que erosionen aún más la delicada situación actual.
Además, aunque con algunos altibajos, los datos económicos de Estados Unidos están apoyando unas mejores sensaciones en los mercados financieros. La semana pasada, la confianza consumidora como los índices que anticipan la evolución futura de la economía experimentaron subidas por encima de las expectativas del consenso del mercado, sosteniendo a los indicadores americanos en zona de máximos.
Tanto el S&P como el Nasdaq van camino de cerrar el ejercicio con rentabilidades del 25%, mientras que el Dow Jones sube más de un 15%. Confirmando la racha alcista de la última década. Una racha que parece va a mantenerse después de que la Reserva Federal haya anticipado la subida de tipos para 2022 con el fin de contener la inflación.
En Europa, sin embargo, las perspectivas de crecimiento siguen siendo limitadas mientras el BCE continúa empeñado en su programa de estímulos convencido de que las presiones inflacionistas son transitorias y no tan estructurales como se empieza a pensar el conjunto del mercado. A ello se suma además el creciente riesgo geopolítico con el incremento de las tensiones entre Rusia y Ucrania que amenaza con la estabilidad de la zona y de los mercados financieros europeos.
Con estas referencias, señalan los analistas, no parece que el Ibex 35 pueda tener mucho más recorrido a corto plazo. La recuperación de la referencia de los 8.400 puntos puede animar algunas compras más para acercarse hacia los 9.000 puntos, pero en general los analistas consideran que bastante tendrá con aguantar los niveles actuales a corto plazo ante un primer trimestre de 2022 que se presenta muy complicado.
Calendario semanal de bolsa
Los datos de actividad e inflación en España marcarán esta última semana en las bolsas españolas, de las que ya no se espera más que los habituales ajustes de final de año después del nuevo fiasco, un año más, del “rally” navideño.
Este lunes, los inversores apenas contarán con los datos de producción industrial en China y las ventas al por menor de Alemania.
En la sesión del martes se darán a conocer la tasa de paro y la producción industrial de Japón, las ventas al por menor en el Reino Unido y el índice de precios inmobiliarios Shiller en Estados Unidos.
Para el miércoles se esperan el agregado monetario M3 en la zona euro, que permite al BCE medir las presiones inflacionistas, y las casas pendientes de venta en Estados Unidos.
El jueves, última sesión del año, los operadores deberán estar atentos al IPC, en su nivel más alto en 30 años. y a los indicadores de actividad PMI en España. Muy poca cosa para cerrar el ejercicio.