Para minimizar el riesgo de compra en tiendas pequeñas existe un decálogo de consejos cuyo cumplimiento ahorrará más de un disgusto al internauta.
Todo lo que siempre quiso saber sobre seguridad en internet y no se atrevía a preguntar es una asignatura de obligado cumplimiento para el comprador en estos momentos. Durante el año pasado, eventos como el Black Friday, el Cyber Monday o la propia campaña de Navidad han catapultado las ventas online y han hecho incluso que estas se sitúen por encima de las que se han realizado de forma física.
Empresas como Amazon, Aliexpress, El Corte Inglés, Carrefour o Ikea han disparado sus ventas a través de internet. En tanto, los pequeños comercios están sufriendo las negativas consecuencias del crecimiento del fraude que ha acompañado a la explosión de esta actividad. El comprador puede monitorizar la seguridad de la pequeña empresa a la que va a realizar sus compras. Y debe hacerlo en la triple vía tecnológica, legal y de sentido común.
Supervisión digital
Lo primero en lo que debe fijarse el cliente es si la dirección online de la empresa contiene la especificación https:// que corresponde a un protocolo de seguridad que cifra la información que se envía por Internet. Es el denominado SSL/TLS (secure sockets layer/transmission layer security). Cuatro de cada cinco sites mundiales cuentan con este protocolo de seguridad.
La segunda pista sobre la autenticidad del vendedor es un candado que aparece también en la barra de direcciones. Se trata de una certificación realizada por entidades fidedignas. Indica que se trata de una web de una empresa determinada, en caso de que el candado se encuentre en verde. Si se pincha, se accede a información sobre ello.
Aunque existan webs que no cuenten con estos dos indicadores de fiabilidad, resulta imprescindible que en las páginas en las que se introducen los datos personales y de pago dispongan de estos estándares de seguridad.
Una tercera medida es indagar sobre la empresa, a través de los buscadores de internet. También se puede acudir a las web domaintools o dominios.es para conseguir información en caso de dominios .com, .org o .net que informan sobre la propiedad o la fecha de creación de la empresa, asegura la web Xakataka.
Un estudio elaborado por IAB Spain y Elogia, asegura que 22,5 millones de españoles realizan compras online, lo que representa siete de cada diez internautas de edades comprendidas entre los 16 y los 70 años.
Al filo de la duda
La Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) ha publicado un decálogo imprescindible sobre la seguridad a la hora de comprar en una tienda.
Hay que descartar aquellos comercios que no faciliten información sobre la empresa (dirección, CIF/NIF), porque son datos imprescindibles si hay que realizar una reclamación. Recomienda revisar si la tienda dispone de un certificado digital, como se ha comentado, porque garantiza la seguridad en los datos personales. Además, debe contar con los clásicos textos sobre términos y condiciones o política de privacidad.
También advierte sobre tres recomendaciones que resultan elementales. Se debe huir de comercios que ofrecen precios muy bajos. De los que establecen varias formas de pago y al final sólo es posible operar a través de tarjetas de crédito. Y, sobre todo, de los que no tienen comentarios en ningún foro ni en la red.