Un avance sustentado en una intensa actividad y en la mayor confianza que genera el nuevo equipo gestor frente a la errática gestión precedente.
Desde la llegada de Andreas Naeun a mediados de junio, el interés por la compañía se ha disparado con la mirada puesta en la mejora de la visibilidad del negocio. Sobre todo, preocupa el apuntalamiento de la actividad “onshore” que ha sufrido tres revisiones en el ejercicio con India, que aporta cerca del 20% de esta división, en el punto de mira.
Unas grandes expectativas que parecen se están viendo confirmadas con los nuevos contratos del fabricante de aerogeneradores. Esta misma semana, ha recibido un pedido para dos parques eólicos en Texas, Estados Unidos. El grupo instalará 65 aerogeneradores en ambos parques, que están listos a finales del próximo ejercicio, con su correspondiente mantenimiento durante varios años.
Con estos pedidos, la capacidad instalada de Siemens Gamesa en Texas se acercará a los 6 GW, lo cual viene a reforzar su posición en Estados Unidos. Un mercado clave tras haber instalado 22 GW en 34 Estados, que suministran energía limpia a 6,5 millones de hogares.
Con estos mimbres, Siemens Gamesa se ha convertido en el segundo mejor valor del selectivo en lo que va de año con un alza acumulada cercana al 45%. No solo eso. Esta subida ha colocado al valor en su mejor momento desde el estallido de la burbuja inmobiliaria y financiera de 2008. Todo ello, sin grandes signos de agotamiento, a pesar de las difíciles condiciones actuales tanto de la economía mundial como de las bolsas.
Al contrario, los operadores consideran que es una de las empresas que más se verá beneficiada por las inversiones previstas en la lucha contra la crisis provocada por el coronavirus. En estas condiciones, ven a Siemens Gamesa por encima de los 25 euros en los próximos meses, muy cerca de sus máximos absolutos.