De hecho, no parece haber demasiada preocupación respecto a la evolución de sus cuentas a final de año tras ganar cerca de 500 millones de euros hasta septiembre, un 17,7% más, con unos ingresos por encima de los 4.000 millones de euros con un avance de un 7,8%.
A estas buenas previsiones contribuye la estrategia de crecimiento inorgánico adoptada en los últimos meses por el laboratorio. La última operación ha sido hacerse con el control absoluto de la estadounidense Alkahest tras adquirir el 55% del capital a un precio de unos 120 millones de euros al cambio, libres de deuda. Los primeros 16,4 millones de euros los ha abonado al cierre de la operación y el resto los desembolsará en febrero del 2021.
Alkahest, con sede en Silicon Valley, es una compañía biofarmacéutica de estadio clínico dedicada a enfermedades neurodegenerativas y relacionadas con el proceso de envejecimiento que usa terapias transformativas basadas en un profundo conocimiento del proteoma plasmático. Compañía que vendrá a reforzar el proceso de diversificación tanto de negocio como geográfico del laboratorio catalán.
El grupo consigue de este modo ir disipando algunas amenazas competitivas a corto plazo, lo cual eleva sus perspectivas en el mercado. De hecho, de las siete casas de análisis que siguen al valor, según Facset, cinco recomiendan comprar o sobreponderar y dos mantener. Entre estas últimas se encuentra JP Morgan y, con todo, le confiere al valor un precio objetivo de 33 euros.
Esta valoración, muy cerca de la media del consenso, representa un potencial alcista del orden del 35% desde su actual cotización de mercado. Para ello, apuntan los analistas técnicos, deberá vencer antes la dura resistencia que encuentra a corto plazo en los 25 euros por acción.