El grupo con más de 150 complejos en 45 países del mundo, en España es uno de los principales competidores de Utópicus de Inmobiliaria Colonial, tiene previsto empezar a cotizar en Wall Street en septiembre, aunque aún no está fijada la fecha definitiva, una vez presentada la documentación confidencial para su oferta pública de venta (OPV) a finales del año pasado.
Una salida que se produce mucho antes de lo esperado por los inversores para aprovechar las buenas condiciones del mercado americano y tras mejorar sus condiciones financieras. La compañía se encuentra en negociaciones con varios bancos americanos para negociar un crédito respaldado por activos de entre 5.000 y 6.000 millones de dólares, casi el triple de lo previsto en un primer momento.
Wework, compañía que quiere cambiar la cultura de trabajo en el mundo, prevé cerrar estas negociaciones en las próximas semanas con el fin de reducir el importe que necesita captar en su salida a Bolsa y elevar las posibilidades de éxito de la operación. Incluso así, los expertos creen que será la segunda OPV más grande de este año por detrás de la de Uber Technologies en mayo, cuando esta compañía captó del orden 8.000 millones de dólares.
Las últimas valoraciones estimadas con la recaudación de fondos de SoftBank elevan la capitalización del grupo hata las inmediaciones de los 47.000 millones de dólares.