Uno de los mecanismos que tienen las empresas para gestionar su exceso de liquidez y de retribuir a sus accionistas son la recompra de acciones. Cuando las compañías generan excesos de liquidez de sus negocios, después de pagar los gastos de sus negocios y de efectuar las necesarias inversiones, algunas empresas, consiguen generar mucha más liquidez que lo que necesitan para llevar adelante sus actividades. Algo tan simple como dejar su exceso de liquidez en depósito es una decisión corporativa, aunque hay otras alternativas.
Como el número de acciones en el mercado se ve disminuido, estas compras inmediatamente aumentan los beneficios por acción de la compañía en cuestión (la división de las ganancias en total de la empresa por su número de acciones en el mercado), lo cual recibe un impacto al alza en la cotización.
La recompra de acciones por parte de las empresas es preferible a los dividendos, desde el punto de vista del inversor, ya que estos arrastran una retención del 19% en el momento que se reparten, mientras que una recompra no se pagará a Hacienda. Además, es un síntoma de que tiene confianza que, con el desarrollo de su negocio, no necesitará estos fondos para llevar adelante sus negocios.
Naturgy, Acerinox e Iberdrola se apuntan a la fórmula
Así las cosas, existe un número creciente de compañías españolas que se han subido a este carro en los últimos tiempos a modo de cebo para los accionistas. Sin ir más lejos, Naturgy es una de las compañías que se han unido últimamente a esta puesta estratégica. En los últimos días ha llegado a adquirir 904.207 títulos propios en los que invirtió 20,49 millones de euros. Según consta en la información remitida por la compañía a la CNMV, Citigroup Global Markets y Link Securities actuaron como intermediarios en las operaciones. Su impacto en los mercados prevé que sea elevado a medida que avance el calendario.
Por su parte, Acerinox está encontrando un apoyo extra en el plan de recompra de acciones puesto en marcha antes de navidades. El 21 del pasado mes de diciembre comenzó el primer plan de recompra de títulos propios, que tiene en mente la adquisición de hasta 66 millones de euros, o lo que es lo mismo, 5,52135 millones de acciones, lo cual representa el 2% del total de su capital.
Hasta el 14 de enero habría comprado ya 1,247 millones de títulos (23% del conjunto del programa) a un precio medio de 8,81 euros por acción, habiendo empleado, por lo pronto, 10,98 millones de euros. Así, desde la aprobación de estas medidas, el valor se ha disparado ya más de un 6% en los mercados, incluso teniendo en cuenta las incertidumbres que han planeado sobre las bolsas en el último tramo del ejercicio pasado.
Así lo cree también el equipo de expertos de Renta 4, que considera que el programa de recompra de acciones debería suponer para la cotización.
Por su parte, Iberdrola se sigue subiendo a ese mismo barco al haber ampliado con fuerza su autocartera. Los últimos datos reflejan la adquisición de un total de 132,53 millones de acciones propias, lo que equivale al 2,072% del capital, por unos 850 millones de euros. De igual modo, se estima por parte de las casas de análisis una repercusión positiva en la bolsa.
Repsol ofrece acciones para empleados
Otra medida de calado que está resonando sobre el entorno bursátil es la decisión de Repsol de sacar adelante el plan de adquisición de acciones 2019 para empleados. Este plan contempla que el total de los trabajadores que participen podrán solicitar hasta un máximo de 9,43 millones de euros en acciones, con el que permite a sus beneficiarios recibir parte de su retribución correspondiente al ejercicio pasado en títulos de la compañía.
Para este ejercicio 2019, el plan se inició el 1 de enero y finalizará el 31 de diciembre. La entrega de acciones a los beneficiarios se realizará con carácter mensual. Lo hace, curiosamente, tras poner punto final al programa de recompra de acciones con el que compró 62,7 millones de acciones, un 3,93% de su capital.