DESDE EL PARQUET

Adveo, círculo vicioso

El acuerdo al­can­zado por Adveo con los ad­mi­nis­tra­dores del con­curso de acree­dores de Unipapel, em­presa que en tiempos fuera una de sus mar­cas, ha ve­nido a dar un pe­queño res­piro a la pé­sima si­tua­ción en Bolsa del grupo de equi­pa­miento de ofi­cina, pa­pe­lería y ma­te­rial es­co­lar.

Nada más conocerse los decepcionantes resultados al cierre del primer trimestre, con unas pérdidas cercanas a los 3 millones de euros, la cotización del valor se desplomó a mínimos históricos. Las acciones del grupo han llegado a cotizar en estos días por debajo del nivel de 1,5 euros, un 40% más barato que al arranque del ejercicio e infinitamente lejos de los 16 euros a los que llegó a pagarse hace apenas cuatro años.

Por eso, el acuerdo con Unipapel ha sentado como un bálsamo en las heridas abiertas de Adveo. Una vez constatada la inviabilidad de la venta de unidad productiva del grupo papelero, ambas sociedades han acordado la terminación del contrato de arrendamiento de las tres fábricas (Tres Cantos, Logroño y Aduna) que hasta la fecha venía ocupando Unipapel con el consiguiente reintegro de la posesión a Adveo de dichos inmuebles.

La intención del grupo de materiales de oficina una vez recuperados estos activos es proceder a su venta lo antes posible, lo cual pone fin al proceso de desahucio y reclamación de rentas, instado contra Unipapel.

El acuerdo contempla además la colaboración de Adveo para la comercialización tanto de la maquinaria como de las existencias depositadas en las instalaciones de la empresa concursada con la condición de obtener la mejor oferta posible.

Este pacto, vinculante para las partes, está sujeto a la previa homologación del Juzgado de lo Mercantil nº 3 de Madrid, órgano que está conociendo el concurso de Unipapel.

Con los posibles ingresos de estos activos, Adveo espera subsanar los problemas de liquidez de los últimos meses ante las reticencias de la banca de seguir financiando sus operaciones. Circunstancia que llevó al grupo a contratar en marzo a Houlihan Lokey para buscar inversores que le prestaran entre 30 y 35 millones de euros con el fin de financiar la reposición de productos en sus almacenes para servir a sus clientes.

Busca así romper un círculo vicioso que ha dejado al grupo en una situación extremadamente delicada, a juicio de los operadores. El mercado, sin embargo, parece haberle dado el beneficio de la duda tras este acuerdo. La cotización ha rebotado de inmediato cerca de un 10% con un importante volumen de negocio, lo cual puede es un primer paso para cambiar su tendencia negativa Los expertos, con todo, todavía no las tienen todas consigo mientras no recupere al menos la cota de los 2 euros por acción.

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