Además, el mercado recibió mal la noticia de que el holding frenaba su expansión, a consecuencia de los atentados terroristas de Bruselas, lo que no fue compensado ni siquiera, parcialmente, por el hecho del que en el primer trimestre, que es habitualmente el más flojo del ejercicio, el grupo hubiera batido holgadamente las previsiones de los expertos. Tampoco halló repercusión espacial el hecho de que los responsables de la compañía estimaran, en el entorno de los 1.200 millones de euros, el ahorro que generaría la contención de los precios de los carburantes.
Y en esta dinámica, ayer pasó completamente desapercibido para los inversores la propuesta, que someterá a la aprobación de la junta el consejo, para abonar un dividendo complementario, con cargo a los resultados de 2015 de 0,10 euros brutos, con lo que la retribución total con cargo al pasado año totalizará 0,20 euros.