Esta es la principal conclusión de un sondeo realizado por la Fundación ICO, que también arroja un puñado de datos interesantes: los responsables de las pymes encuestados señalan que el Euribor ha dejado de ser un problema –está al 0% y bajando- pero las entidades financieras han elevado la exigencia en cuanto a garantías y han subido las comisiones y gastos aparejados a los préstamos.
Frente a 60,5% que explica que antes de la crisis conseguía más y mejor financiación, el 12,6% dice que las dificultades son las mismas y un exiguo 5,3% apunta que la situación crediticia ha mejorado.
Un mercado aún precario
Un 50% de los empresarios consultados considera que la actual situación del mercado crediticio es una traba para las pequeñas y medianas empresas, frente al 33,4% que opina lo contrario. Por otra parte, un muy mayoritario 88,5% cree que las empresas quieren recibir más crédito a tipos de mercado que el que actualmente concede la banca.
Como ya se ha dicho, según el informe las mayores zancadillas que encuentran las pymes en su camino a la financiación son las severas garantías y avales que exigen las entidades, que han aumentado en opinión el 40,4%; y los cobros asociados a los préstamos, que se han incrementado según el 35,6% de los encuestados.
Otra de las conclusiones más significativas del sondeo es que las empresas no piden dinero a los bancos para expandirse, sino para esquivar el cierre. El 52,5% afirma que prefiere reducir la cantidad que adeuda a invertir en la compañía.
La opinión de la banca
La Fundación ICO hizo una encuesta paralela para conocer la percepción de los que están en la otra orilla: las sucursales bancarias. Las entidades, al contrario que las pymes, ven un sensible aumento del crédito, impulsado por la evolución positiva de la coyuntura económica. Observan que la oferta de crédito ha subido en los últimos tres meses, mientras que la demanda de financiación por parte de las pequeñas y medianas empresas se mantiene constante.
Admiten, no obstante que el incremento del crédito se centra en los clientes preferenciales -casi el 60% de los encuestados informa que ha habido una jugosa subida en los últimos tres meses- y aquellos que aportan garantías y avales personales –el 50% de los banqueros ha registrado un aumento de los préstamos a éstos últimos en el mismo período-.