El ejercicio 2016 no sólo está marcado para los bancos por tipos de interés a cero, lo que les supone una presión aún mayor en márgenes. La mayoría de las entidades han apostado de manera muy decidida por el proceso de transformación digital, con propuestas concretas o con una serie de iniciativas para canalizar la inversión tecnológica que sea necesaria.
Bien es cierto, que los distintos anuncios realizados en los últimos días distan mucho del tono casi apocalíptico que desde hace años despliega el presidente del BBVA. Francisco González (FG) está obsesionado con esta transformación hasta el punto de haber manifestado que BBVA se convertirá en una empresa de software. Lejos de esos extremos se ha posicionado en varias ocasiones la consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa. Durante la reciente junta de accionistas de esta entidad, su principal ejecutiva ha informado sobre la creación de pequeño grupo para que "supervise la selección de nuestras inversiones en el mundo digital y dé seguimiento a todos los progresos que hacemos en esa área, para estar calibrando los beneficios obtenidos por tales inversiones".
Es decir, no todo proyecto o iniciativa tecnológica es válida para los responsables de Bankinter. "Queremos, en este tema, como en tantos otros, darle un enfoque eminentemente práctico, aunque perdamos algo de glamour", precisó Dancausa en una clara referencia a la estrategia y discurso desplegado en los últimos años por FG. "No nos podemos permitir otra cosa, y si nos la pudiésemos permitir, también iríamos a lo más práctico", sentenciaba la consejera delegada de Bankinter.
Tan sólo 24 horas después, la presidenta del Santander, Ana Botín, también se guardaba un anuncio similar ante la junta de accionistas del grupo celebrada en Santander, al retomar el Consejo Asesor Internacional, bajo la presidencia de Larry Summers (ex secretario del Tesoro de Estados Unidos), con el fin de avanzar en su proceso de transformación digital.
Eso sí, Ana Botín puntualizó que "el auténtico poder de la tecnología para transformar la vida de las personas surge cuando la adaptan y distribuyen empresas como la nuestra. La manera en que internalicemos y nos adaptemos a las nuevas tecnologías en los próximos años determinará nuestro éxito".
La presidenta del Santander recordó que "estamos invirtiendo y hemos avanzado mucho en nuestra transformación digital en 2015. Aumentamos nuestros clientes vinculados en 1,2 millones y los clientes digitales en 2,5 millones", ya que el proceso multicanal es una de las prioridades estratégicas del grupo.
##Planes diversos
El reto digital no se limita a los grandes grupos financieros y hasta los más pequeños también han impulsado sus planes al respecto. Uno de los últimos en anunciarlo ha sido BMN, con participación mayoritaria del Estado mediante el FROB. El grupo presidido por Carlos Egea puso en marcha recientemente su aplicación para el pago por móvil, que ya suma 2.255 descargas.
El banco creado en torno a Caja Murcia ya ha contabilizado que el número de operaciones de sus clientes mediante el móvil se ha incrementado en un 48%, mientras que la operativa por banca móvil ya representa un 22%, frente al 58% que todavía se concentra en las oficinas, que quedan relegadas a cuestiones más complejas.
Banca March también cuenta con un plan de transformación digital hasta 2018, con una inversión que representa el 15% de los gastos generales de la entidad familiar. Su consejero delegado, José Nieto, ya se ha encargado en los últimos días en precisar que han duplicado la inversión en tecnología y que se incrementará aún más en los próximos años. "Es un esfuerzo presupuestario necesario", sostiene Nieto.
Banco Sabadell también ha puesto toda la carne en el asador durante su actual plan estratégico para la transformación digital. En el último año, el número de clientes que operan tan sólo por móvil se ha incrementado en un 80%, hasta cerca de 300.000 y el 85% de la operativa se realiza ya fuera de sus oficinas. Eso sí, su presidente, José Oliu, se muestra más humilde que otros competidores y señala que de ese proceso "no hacemos gran explosión verbal".
Incluso, la aseguradora Mapfre cuenta con su propio plan de transformación digital, como ya comunicó ante la junta de accionista de este año su presidente, Antonio Huertas. Con más de 200 proyectos digitales en marcha, "esta iniciativa tiene tres perspectivas: la del cliente, ayudando a mejorar su interacción con Mapfre; la de la operativa, ya que al digitalizar los procesos seremos más eficientes y productivos; y la de la organización, ya que podremos simplificar las estructuras y abrirlas más para ser más transparentes y efectivos", explicó Huertas.
Desde luego, el discurso digital ha dejado de ser el mantra exclusivo de algunos y se extiende como una balsa de aceite sobre el conjunto del sector financiero. Pero con unos proyectos más concretos y menos planteamientos teóricos.