España se sitúa muy por debajo de la media europea, que es del 53%, y aún más lejos de los países que lideran esta actividad, como Reino Unido (81%) o Alemania (73%).
España se coloca por delante de países como Letonia, Lituania, Polonia, Hungría, Portugal, Italia, Chipre o Grecia. Por delante aparecen países con menor renta per cápita que España y por supuesto con menos PIB agregado, como Eslovaquia, República Checa, Malta, Irlanda o Estonia. Por supuesto, países más ricos como Holanda, Francia, Austria, Dinamarca o Bélgica nos superan ampliamente en penetración del comercio electrónico por porcentaje de habitantes habituados a esta forma de comprar.
El e-commerce en España ha crecido un 27% (en tasa interanual y ha alcanzado una facturación trimestral de 4.945,9 millones. Esto supone el décimo trimestre en el que la facturación del sector crece, lo que implica más de dos años de crecimiento. Además el número de transacciones ha crecido hasta los 70 millones, la cifra más alta recogida hasta el momento.
Desde principios de 2013 el sector no ha parado de crecer, el primer trimestre de aquel año supuso una facturación de 2.822,6 millones de euros. Hoy, con los últimos datos que se disponen, esa facturación se ha disparado hasta un 71,5%.
Por sectores, las industrias con mayores ingresos han sido las agencias de viajes y operadores turísticos, con un 19,6% de la facturación total; el transporte aéreo, con un 13,3%, y las prendas de vestir, con un 6%. Por su parte, el márketing directo y la venta de discos, libros, periódicos y papelería lideran el ránking por compraventas, con un 8,7% y un 7,2%, respectivamente.
Estas cifras son ratificadas por otras fuentes. España es uno de los países que más crecimiento del e-commerce ha experimentado en Europa al cierre de 2015, con una tasa del 22,5% frente al 20,1% de la media europea, según recoge el “Libro Blanco de Marketing de Resultados en E-Commerce” realizado por el Observatorio E-Commerce y Transformación Digital. Además se estima que el crecimiento continúe en los próximos años.
Diversos factores
El crecimiento se apoya en varios factores, según esta fuente, que abarcan desde el acceso a internet hasta la cada vez mayor confianza en el comercio online y el precio. La primera compra en e-commerce se realiza por los precios, descuentos, promociones y cupones, entre otros. La segunda se consigue gracias al servicio: los usuarios no solo buscan comprar, sino conectar con la marca, que se le ofrezca una experiencia omnicanal en la que se sienta cómodo con la página web, redes sociales e incluso tienda física si la hay.
Todo apunta a que durante el 2016 las ventas y la facturación seguirán creciendo al mismo ritmo, según la CNMC. Sin embargo, mientras este sector crece, una rama del mismo emerge, si cabe, más rápidamente. Se trata del m-commerce o el comercio a través del móvil.