Pero junto a frases que reflejan esas preocupaciones, el Informe Especial que publica este jueves Financial Times hay otras de esperanza y de apuesta por una España que no tire por la borda la recuperación. El órgano de cabecera de la City londinense y del mundo del dinero apuesta decididamente por esa España que siga su crecimiento sostenido después de haber sacado la cabeza del pozo de la recesión.
El informe se titula ‘España: ‘Vuelve la confianza empresarial, pero es difícil predecir el resultado de las elecciones de diciembre’. Y desarrolla esa idea central en una serie de informaciones y análisis. Uno sobre cómo la pugna política ante el 20-D está afectando a las esperanzas de recuperación económica; otro sobre los grandes desafíos y el largo camino que queda todavía pese a esa recuperación; otro sobre el aumento de beneficios empresariales, el desapalancamiento y el flujo inversor;.
Más todavía: otro sobre qué va a pasar en Cataluña tras el 27-D, ‘que ha resuelto poco’ al reivindicar la victoria tantos los del Sí como los del No; otro sobre la implantación de Ciudadanos y Podemos, que ‘están aquí para quedarse’; otro sobre el renacimiento del cine español, que ha despertado otra vez el interés de los espectadores; y otro sobre la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría: la 'indiscutible número dos' de Rajoy ‘está a la altura de la tarea’.
‘España se encuentra a sí misma hoy día en un extraño estado de cosas, en un compás e espera’. Así inicia el corresponsal Tobias Buck un largo análisis en el que hace una panorámica general de lo que está pasando y lo que puede pasar. Dentro de las frases negativas, figura los siguientes recelos: ‘Algunos ven en peligro la unidad del país. Otros rezan por un remozamiento total del orden institucional y democrático de las últimas cuatro décadas. Algunos votarán pensando en sus empleos, oros con rabia por la reciente serie de escándalos de corrupción’.
Sigue el repaso: ‘Entre los inversores y los dirigentes empresariales, hay preocupación por si España está a punto de entrar en una fase de agitación, inestabilidad y fragmentación. En otros ámbitos hay miedo, no menos profundo, de que todo seguirá tal cual. Hay nerviosas conversaciones sobre los nuevos partidos y líderes que han entrado en la arena política’.
Justo inmediatamente después, el análisis cambia de tono: ‘Pero los más avispados apuestan por que Rajoy mantendrá el cargo otros cuatro años’. Añade: ‘A lo largo del último año, el país ha pasado del pelotón de los torpes de la eurozona a ser uno de los de mejor comportamiento en el área de la moneda única. El PIB está previsto que crezca más del 3% ese año, una de las mejores tasas del mundo desarrollado. El desempleo está cayendo más rápidamente de lo que casi todo el mundo creía posible hace unos años. La confianza entre los consumidores y las empresas es alta, y la demanda doméstica está creciendo después de años de debilitamiento’.
No obstante, como la Comisión, como el FMI, como la OCDE, como todos los organismos, FT advierte: ‘Los pronósticos esperan que siga el crecimiento, pero avisan de que ese ritmo de expansión se reducirá a menos que el país profundice sus esfuerzos reformistas. Y concluye: ‘Decir que los españoles irán a las urnas a fin de año en pleno estallido de optimismo y fe en el futuro sería falso, claramente. Pero pese a todos los retos que siguen ahí, hay una creciente sensación de que se están dispersando los nubarrones’.