DESDE EL PARQUET

Endesa: deuda y mayor rentabilidad

Las ac­ciones de la em­presa eléc­trica Endesa han re­cu­pe­rado atrac­tivo en los úl­timos me­ses, im­pul­sadas por la es­tra­tegia di­señada por la ita­liana Enel para op­ti­mizar la ren­ta­bi­lidad de su fi­lial es­pañola.

Sin embargo, el plan estratégico genera dudas entre los inversores, puesto que las cifras de Ebitda que prevé la compañía para este ejercicio y los próximos son inferiores a las que ellos barajaban. El anuncio de un nuevo dividendo extraordinario de 6 euros brutos por acción ha sido bien recibido inicialmente.

Aunque no parece que el objeto perseguido con dicho abono, que tildan de ‘re-apalancamiento’ de la sociedad, no ha gustado a algunos buscadores de gangas.

El importe total de este dividendo, que se pagará el 29 de octubre, es de 6.352,5 millones de euros y será financiado en parte a través de un préstamo de 4.500 millones de euros a 10 años a un tipo fijo del 3% y de una línea de crédito de 1.000 millones de euros a un año a Euribor más 0,6%; el resto hasta cubrir los 6.353,5 millones necesarios se financiará mediante otros instrumentos de liquidez disponibles de la sociedad.

En definitiva, que Endesa se endeuda para pagar un dividendo y no para abordar nuevas inversiones, que incrementen los ingresos. Con la asunción de estos créditos, la deuda financiera neta de la compañía, que con la venta a Enel de su 60,6% en Enersis se reducía hasta unos 1.400 millones de euros (unas 0,5 veces el Ebitda), vuelve a subir y se situará en torno a 6.900 millones de euros, que representarán unas 2,3 veces el Ebitda, lo que resta atractivo al valor.

La compañía explica que este dividendo es independiente del de 7,79 euros que se ha sometido a la aprobación de la próxima junta general, como consecuencia de las compraventas de activos, si bien ambos están condicionados a la ejecución de dichas operaciones y se abonarán en la misma fecha.

Por otra parte, la compañía propone el reparto de un dividendo ordinario con cargo a los resultados del ejercicio en curso de 0,76 euros por acción, adicional a los dos extraordinarios, que se pagará en dos veces (enero y julio de 2015). Y se ha fijado el objetivo de que el dividendo ordinario crezca, al menos, un 5% en 2015 y en 2016.

Como consecuencia de estos dividendos extraordinarios, el grupo español pagará en total el próximo día 29 14.605 millones de euros, de los que 13.438 millones pasarán al accionista de referencia: Enel, que controla el 92% del capital.

Las acciones de Endesa operan en torno a 30 euros, con una revalorización acumulada en el año del orden del 29%. Hasta ahora, los precios objetivo calculados para este valor fluctuaban entre los 31,8 euros de Bankinter y los 33,80 euros de Société Générale, pasando por los 33,69 estimados por Banco Sabadell.

No obstante, los expertos de Bankinter han anunciado ayer mismo que revisarán su precio objetivo, a la vista de que se están cumpliendo algunos de los factores de riesgo que temieron que pudieran confirmarse hace un mes.

Indudablemente, Endesa define una política de dividendos ordinarios interesantes, con incrementos de, al menos, un 5% en los dos próximos años, si bien por otra parte, la compañía aumenta su endeudamiento sensiblemente y no para afrontar inversiones productivas, precisamente.

Artículos relacionados