Según el presidente de Google la medicina y la presencia virtual serán los grandes cambios para un futuro próximo, digno de las series de ciencia ficción. "La medicina de hoy parecerá que estaba en la Edad Media comparada con lo que va a ser en el futuro", ha declarado Schmidt en relación a los avances en la cantidad de datos empíricos que podemos obtener a través de las nuevas tecnologías sonre cómo funciona el organismo humano y cómo reacciona antes las enfermedades.
El empresario plantea un panorama realmente futurista donde "cada uno tendrá un asistente médico que le supervisa y le vigila (a través de las tecnologías en red) , y cuando detecta que algo no va bien, le avisa". En este sentido, destaca un proyecto de la compañía que ha permitido inventar una lentilla de contacto que transmite los datos de la lentilla a la red y permite obtener información sobre el estado de salud del paciente.
El siguiente gran cambio que Schmidt pronostica está relacionado con el ocio y el tiempo libre, aunqeu también supondrá cambios importantes para las empresas, sobre todo en ahorros en transporte para reuniones internacionales y por el teletrabajo. Se trata de la presencia virtual, algo así como las holografías de las películas futuristas. "en el futuro va a ser posible estar prácticamente en cualquier sitio y además simular que uno está ahí de manera visual, auditiva y táctil". No sólo eso, si no que además supondrá una gran variedad de eventos de ocio a distancia ya que el usuario podrá tener la sensación de que está en cualquier parte y realizando cualquier actividad, como ver un concierto de rock, desde el salón de su casa.
Sin embargo, Schmidt ha advertido sobre los riesgos a los que se enfrenta este panorama "ideal". El ejecutivo de Google se ha referido a la brecha digital como un gran problema y ha criticado la polémica normativa sobre la propiedad intelectual en Internet: "hay muchas industrias muy potentes que quisieran simplemente prohibir cosas que suceden en Internet pero prohibirlas haría que Internet no funcionara o estarían violando la libertad de expresión". En este sentido, se ha referido a la ley estadounidense SOPA, que ya ha sido aprobada por países como España,
En vez de borrar las web con contenido ilegal, Google propone perseguir a quienes establecen modelos de negocio que se lucran de este contenido: "Es muy fácil que alguien que realice descargas ilegales pasando de una página a otra, pero si quieren ganar dinero tendrán que quedarse en un sitio concreto el tiempo suficiente. Ahí los atraparemos porque lo que hacen es delictivo", ha explicado.