Bien es verdad que las cosas en este sentido le están saliendo muy bien al equipo de Economía de Mariano Rajoy. Ni las crecientes dudas sobre la capacidad de Grecia para no caer en suspensión de pagos, ni las advertencias de Draghi de que la situación económica en Europa es muy grave, ni la rebaja de la calificación de la deuda española, han desanimado a los inversores.
España cerraba con un nuevo éxito la segunda subasta de deuda del año y la primera tras la decisión de Standard & Poor's de rebajar su calificación de solvencia en dos peldaños (de AA- a A). Esta contrariedad que costará mucho superar, no ha tenido incidencia en las bolsas de valores y no ha afectado a los planes del Tesoro. Ha colocado 4.880 millones en letras a 12 y 18 meses a la mitad de precio que en la subasta previa, es decir al 2,15 y al 2,49% respectivamente. Primera prueba superada. Estaba dentro de lo previsto. Pero, las grandes pruebas llegarán en primavera.
Según los datos recopilados por Bloomberg, los meses de mayor dificultad para el Tesoro español serán los de abril, julio y septiembre en los que tendrá que devolver nada menos que 26.899 el 12 de abril, 31.610 el 12 de julio y 31.762 el 12 de septiembre. La situación será algo más llevadera en el 2013 en el que habrá que devolver un 38% menos que este año, pues baja a 108.983 la herencia recibida. Sólo habrá que añadirle las emisiones que haga a muy corto plazo el Tesoro que se supone serán las mínimas. Su estrategia es cambiar el endeudamiento de corto a largo plazo.
Así la preocupación del Ejecutivo se centra en este ejercicio. Debe devolver mucho dinero y además hay que recaudar para inyectar en el sistema con el que evitar la recesión.
Es la razón por la que el Ejecutivo de Mariano Rajoy trata de encontrar ayuda en los fondos europeos sin que esto tenga que ir asociado a la petición de una ayuda vinculada a la idea de contraprestaciones adicionales que aprueben el FMI, la Comisión Europea y el Banco Central Europeo. La temida ‘troika' cuya intervención es interpretada por la opinión pública como el paso previo para no entrar en suspensión de pagos.
Tranquilidad en la banca al contar con el BCE
El presidente del Gobierno quisiera tanta tranquilidad para la deuda soberana como han encontrado los bancos gracias a la financiación del Banco Central Europeo que el próximo 28 de febrero volverá a inyectar ingentes cantidades de dinero a tres años y al 1%.
No sólo se les ha solucionado su problema de liquidez. Laasignatura pendiente es que esta liquidez llegue al cliente final, las empresas y las familias. Según el presidente del Banco Central Europeo Mario Dragui, el crédito está funcionando muy bien porque ya está llegando dinero a la economía real.
El hecho es que no van a tener ningún problema para devolver los aproximadamente 120.000 millones que deben este año las entidades financieras españolas. Febrero y junio con 15.837 millones de euros y 16.549 millones respectivamente, son los meses en que el pago de la deuda privada de estas entidades es más abultado.
Falta por comprobar cómo están llegando al sistema económico estos recursos que Draghi da por hecho que lo está haciendo. Las comparecencias de los máximos ejecutivos de bancos, cajas y cooperativas de crédito para explicar las cuentas anuales será otro momento para comprobarlo.