La compañía ha cerrado a mediados de marzo una ampliación de capital de 39,6 millones, mediante la emisión de 14,96 millones de acciones nuevas, con desembolso de 2,65 euros por título. Una operación que supuso elevar el capital en un 48,6%, a fin de reforzar sus recursos y financiar la adquisición de nueva maquinaria, reponiendo al tiempo las salidas de caja empleadas en la recompra de bonos convertibles por importe de 27,8 millones de euros.
Esta operación fue bien gestionada y experimentó una nutrida demanda, que sin embargo se ha ido diluyendo, ante las incertidumbres relativas a sus previsiones, que barajan expertos e inversores. El valor opera en el entorno de los 3,25 euros, con un castigo acumulado en el año del orden del 27% y los expertos estiman que seguirá la caída, pues recomiendan vender o infraponderar y sitúan su precio objetivo en la zona comprendida entre los 3 y los 2,8 euros.