La empresa espera que la CNMV autorice en breve la ampliación que acordó la junta general el pasado mes de mayo, mientras que para la obtención del aval es necesario el informe de un especialista independiente, que demuestre la viabilidad del proyecto.
En las nuevas instalaciones, denominadas Ciudad del Zinc, se prevé concluir en un plazo de poco más de seis meses el proyecto RECOX, un método desarrollado y patentado por la compañía, que permite obtener zinc a partir de óxidos de dicho metal procedentes de los polvos de las acerías, en lugar de utilizar blenda (sulfuro de zinc). El plan prevé eliminar 130.000 toneladas anuales de residuos de metales pesados, con un ahorro del 40% en el coste de las materias primas. Además, también se construirá talleres de aleaciones y una planta fotovoltaica, que se espera entre en marcha antes de un año, con tecnología de la empresa estadounidense Solar Thin Films, que desembolsará el 20% de la inversión total, estimada en unos 30 millones de euros.